Como perro por su hueso
Los estudios DreamWorks, los mismos que ofrecieron Madagascar, Kung Fu Panda e incluso Shrek, traen a las pantallas de los cines una aventura animada donde la historia se centra en un joven vikingo llamado Hipo (Hiccup).
Hipo habita en la isla de Berk donde los robustos pobladores pelean a diario con los diversos tipos de dragones, como si fueran plagas, ya que estos no sólo demuestran ser peligrosos, sino que también roban gran parte de sus rebaños e incendian las viviendas del lugar.
El joven vikingo si bien es el hijo de jefe del lugar, resulta ser un fracaso como guerrero y su popularidad es tan baja como su autoestima. Pero su voluntad y decisión lo empujan a intentar ser un verdadero vikingo como los son los demás pobladores.
Pero todo cambiará accidentalmente cuando conozca al dragón más temible de todos los tiempos y descubra su verdadera vocación. Pero lo más difícil será cuando intente demostrarle a su gente que esas bestias, tal cual las conocían, no son lo que parecen.
La historia entretiene a cada momento con mucha acción y momentos graciosos, y al enfocarse sobre un adolecente era inevitable agregarle momentos de drama e incertidumbres por parte del protagonista y su padre, pero no generan más que realismo a la situación.
Los efectos 3D están bien logrados, en especial en los momentos de vuelo y de explosión, que es donde más se genera el cambio en la vista, vista que de a poco se va acostumbrando a este tipo de imágenes.
Recordemos que este film se basó en el libro de Cressida Cowell y está dirigida por Chris Sanders y aunque en las salas se la verá doblada, en su versión original cuenta con las voces de Jay Baruchel a quien se lo verá próximamente en El Aprendiz de Brujo y Gerard Butler (300, Días de Furia), quein estará dentro de muy poco en las carteleras con Caza Recompensas.