Manual de vida
La opera prima de Fernando Salem tiene sensibilidad y sentido del humor, un muy buen elenco y la belleza del paisaje sanjuanino.
Cómo funcionan casi todas las cosas podría ser una más de esas películas argentinas con jóvenes apáticos que no saben quiénes son ni hacia dónde van. De hecho Celina, la protagonista, es una veinteañera sin rumbo: acaba de morir su padre, tiene un noviete al que no quiere, un trabajo fantasmal, una casita en el medio de la nada, y su única motivación a la vista es juntar algo de dinero para buscar a su madre en Italia. Pero aquí sí hay una historia. Pequeña, que se va tejiendo sutilmente, plano a plano, con ingredientes de comedia y road movie, diferentes capas de profundidad y bienvenidas dosis de belleza y sensibilidad.
“Todos vamos por la vida cruzando un desierto y, aun cuando llevamos con nosotros nuestras enciclopedias, hay cosas que no tienen explicación y frente a eso, lo único que podemos hacer es sentir”, declaró Fernando Salem en una entrevista. Para seguir con la analogía, algo que hace atractiva a su opera prima es que es tan imprevisible como esa travesía vital. Otro de los puntos fuertes es el elenco, un seleccionado del teatro off –y no tan off- porteño: Pilar Gamboa, Esteban Bigliardi, Rafael Spregelburd, Marilú Marini y Miriam Odorico son algunos de los que acompañan a Celina (Verónica Gerez, toda una sorpresa) en ese viaje físico y espiritual. El paisaje de San Juan, tan poco aprovechado en el cine nacional y tan bien captado por la fotografía de Georgina Pretto, es un marco ideal para la historia.
Hay, además, un elemento disruptivo que aporta otra cuota de humor a la que ya tienen de por sí algunos personajes secundarios y hace todo más llevadero. Celina va por ahí tratando de vender la enciclopedia que le presta su título a la película y, cada tanto, los personajes –mirando a cámara, en formato de entrevista de documental- dan sus propias respuestas a siete de las preguntas existenciales que tal vez contiene el volumen, que van desde “¿Cómo ser feliz?” hasta “¿Existe el amor para toda la vida?”
Y a usted, ¿qué le parece?