Hoy llega Como ganar enemigos, dirigida por Gabriel Lichtmann, escrita en conjunto con su mujer Viviana Vexlir y protagonizada por Martín Slipak.
Lucas Abadi es el responsable y correcto de los dos hermanos abogados. Aunque proviene de una familia de buen pasar, logra ahorrar su propio dinero para comprarse un departamento. Pero el día siguiente a retirar 50 mil dólares del banco, y el día anterior al depósito, conoce a Laura. Hermosa, sexy e inteligente, así se muestra ella. Ingeniosa a la hora de hablar y hasta lectora de las mismas novelas policiales que a Lucas le fascinan tanto a tal punto de fantasear con algún momento en ser él escritor de ellas.
Pero después de una noche indudablemente inolvidable, Lucas se despierta, solo, y el dinero ya no está. A partir de este momento, Lucas ya no sabe en quién confiar y de quién desconfiar. Su hermano, su mejor amigo, la empleada del estudio que amenaza con renunciar. Tiene que ser alguien de adentro, alguien que lo conocía.
Lichtmann y Vexlir construyen una película que funciona desde los aspectos más simples del género pero no mucho más. Los diálogos en general suenan forzados, y las pistas que aparecen y desaparecen, que se siguen y se dejan de seguir, hacen de Cómo ganar enemigos una película con una buena idea pero no lograda. Además, lo predecible de la historia hace que uno conozca la resolución desde pocos minutos de empezada.
No obstante, Slipak le pone garra a un protagónico sin dudas merecido, impregnando a su Lucas Abadi de mucha presencia e incluso ternura.