Muchas veces solemos criticar la traducción de los títulos de las películas, ya sea por no representar la esencia de lo que se narra, o simplemente por develar demasiado.
El caso de la nueva película de Claire Denis me parece todo lo contrario. Su título en inglés es incluso más preciso y potente que el original (cuya traducción fidedigna en español sería “Con amor y determinación”).
Para el mercado internacional el nombre FIRE (“Fuego”), articula con mayor inteligencia todo lo que aborda el film. Claire Denis, -quien acaba de cumplir 78 años hace solo un puñado de días-, ha estrenado este año dos films en Berlín y Cannes respectivamente. Con «Avec amour…» , protagonizado por los excelsos Juliette Binoche (en su tercera colaboración con la cineasta) y Vincent Lindon, ganó el premio como Mejor directora.
La trama es por demás sencilla. Partimos desde un momento idílico: Sara y Jean se besan y nadan en aguas calmas. El silencio es absoluto. Lo primero que aparece es, evidentemente, el agua, lo que hace que cobre sentido el otro elemento al que hace alusión el título: fuego, lo que acontecerá (de manera simbólica) para arruinar esa estabilidad matrimonial.
Luego de unos breves planos, el filme se traslada a París, donde la pareja se encuentra recién llegada de sus vacaciones, sin embargo, al poco tiempo aparece una figura del pasado: François, un hombre con el que Sara estuvo enamorada durante mucho tiempo.
Allí tenemos la potencia narrativa de FIRE, una película que, viendo la carrera de Denis, se siente un tanto desprolija (técnica y narrativamente), poco sutil e impostada en sus búsquedas. Por momentos cuesta creerse este melodrama desatado en el que los personajes se mueven pura y exclusivamente por el vértigo de las pulsiones (sexuales y amorosas)...