Asustar en vez de contar
Las temáticas sobre extraterrestres son usuales dentro de las ficciones cinematográficas, siendo enfocadas de diferentes maneras. Desde el lado tierno y divertido como E.T. hasta los casos oscuros y misterios que se dedicaron ha investigar Molder y Scully.
Siguiendo este tópico, el director de origen nigeriano Olatunde Osunsanmi busca indagar sobre las abducciones alienígenas en su film Contactos de cuarto tipo, basándose en supuestos registros reales.
La cinta transcurre en Nome (Alaska), un lugar conocido por el desproporcionado número de casos de desapariciones que ha habido desde los años 60 y que no han sido descifradas por las múltiples investigaciones del FBI. La psicóloga Abigail Tyler intenta descubrir lo sucedido en estos extraños hechos, mediante sesiones de video con pacientes traumatizados, descubriendo la mayor evidencia de abducción alienígena jamás documentada.
El titulo del film hace referencia a una escala de medición para encuentros con extraterrestres, que se estableció en 1972. Cuando se avista un OVNI, se llama un encuentro de primera clase; cuando se encuentra evidencia, es conocido como un encuentro de segunda clase; cuando se hace contacto con extraterrestres, es el tercer tipo. El siguiente nivel, el secuestro o abducción, es el cuarto tipo.
A su vez, al inicio de la producción, la protagonista del film, Milla Jovovich, brinda una breve explicación de cual va a ser su rol, que el trabajo estará basado en lo que le ocurrió “realmente” a la doctora Tyler y que se van ha exhibir imágenes “verdaderas” sobre la investigación de la psicóloga.
Si se toman como base ambos elementos concretos, se podría decir que el film en su comienzo resulta muy atractivo por la temática y por su aspecto real. Pero al finalizar la cinta, el pobre trabajo de dirección hacen que todo termine siendo fantasioso, increíble e irreal, ya que en ningún momento Osunsanmi se toma en serio lo que cuenta y busca más el efecto que una acertada narración.
La utilización de una combinación entre instantes reales y ficticios, mezclando la actuación de reconocidos actores (Jovovich, Elias Koteas y Will Patton) con escenas “verídicas” sobre lo acontecido en algunas sesiones de la psicóloga con pacientes que tenia extraños pensamientos, confunde más que aclara porque la combinación hace que no se diferencie bien que es verdad y que es ficción. En varios momentos, las imágenes reales parecen un elemento más del guión y no un documento que corrobora la historia, incluidos solamente para darle vértigo e impacto al film y no como un elemento fundamental para comprender y verificar este relato.
El Proyecto Blair Witch también utilizaba grabaciones pseudo reales y utilizaba estas imágenes para contar la trama, haciendo que todo el universo del film se mueva dentro de las reglas que proponía dichas grabaciones. Aquí, la alternancia entre ficción y realidad no permite que nunca termine de creerse lo que se esta narrando, llevando a que el espectador descrea y hasta se burle de lo que esta observando.
Contactos de cuarto tipo tenia una premisa interesante, pero su pobre realización hace que la base de una atractiva historia se tire a la basura. Principalmente, porque el director Osunsanmi busca más hacer un film efectista en vez de contar una interesante trama, llevando a pensar que el propio realizador tampoco creyó en la doctora Tyler, porque sólo busco asustar en vez de contar.