Una historia entretenida que contiene dosis de acción, persecuciones y que además cuenta con la presencia de Nicolas Cage.
El actor, director y productor estadounidense Nicolas Cage (49) ganador de los premios Óscar, Globo de Oro y SAG por su papel en “Adiós a Las Vegas (1995)”, y nominado al Óscar al mejor actor por su papel en “El ladrón de orquídeas (2002)”, vuelve al ruedo con otra de acción y suspenso, dos géneros que le sientan bien. Viene de la mano Simon West como director, de amplia experiencia en este terreno,y que presentó entre otros éxitos : “Los indestructibles 2”; “Tomb Raider”; “El mecánico”; entre otras. El resto del elenco lo componen: Josh Lucas, Malin Akerman, Sami Gayle, Danny Huston, entre otros.
Todo arranca cuando el protagonista Will Montgomery (Nicolas Cage) un ladrón de bancos, es traicionado, atrapado y encarcelado por ocho años, como es de prever cumplido ese plazo sale, ahora quiere hacer buena letra, reencontrarse con su hija, retirarse del negocio pero el dilema es si podrá, siempre la tentación se encuentra en cada momento. Pero tiene que existir alguna traba, su hija adolescente Allison (Gayle) es secuestrada por su viejo amigo un criminal Vincent (Josh Lucas), un villano que resulta indestructible, y que tiene una cuenta pendiente. Para liberarla debe conseguir diez millones de dólares.
Ahora solo tiene un día para reunir el dinero, pagar, poder liberar y volver a ver a su amada hija Allison, de quien además debe recuperar su amor. Como suele suceder en estos argumentos, la formula es: padres separados, hijas adolescentes rebeldes, caprichosas y que no simpatizan con su padre (situación similar a “Búsqueda Implacable” aunque su trama era mejor).
Aunque no se encuentre dentro de sus planes debe reunirse con los integrantes de su antigua banda, para lo cual contacta a Riley (Akerman). Nos encontramos con persecuciones de coches, en medio de un drama familiar y las buenas locaciones de Nueva Orleans, elementos que la hacen más atractiva. De ahora en más él solo está expuesto a 12 horas, 10 millones y 1 hija secuestrada y luego los espectadores sabemos como continua, esto es muy fácil, dado que así se promociona desde el afiche.
La primera media hora está bien, el protagonista Nicolas Cage pone todo su profesionalismo, este género le sienta bien, sabe como explotarlo con un personaje a su medida y con el cual sale airoso. Su desarrollo es similar a muchas otras historias, uno ve distintas escenas y dice esta ya la vi y esta también. Desde relaciones entre padres e hijos conflictivas que finalizan con el reencuentro con su padre queriéndolo y llorando en sus brazos. Surgen una serie de situaciones ridículas, resulta un entretenimiento pochoclero, tiene muy buen ritmo, con persecuciones, luchas, tiros, y explosiones. La banda sonora es maravillosa, contiene momentos de tensión, nerviosismo y suspenso; aunque resulta monótona y mediocre.