“Corralón” se centra en dos empleados de la construcción que se dedican a repartir materiales en distintas obras. En sus recorridos se la pasan hablando de mujeres, yendo a un bar a tomar o comiendo. Pero su rutina cambiará cuando el enfrentamiento con una pareja adinerada y con aires de superioridad que está reformando su casa llegue al máximo punto de ebullición.
Desde un primer momento, la estética en blanco y negro del film y la música a cargo de Axel Krieger nos da el pie y el contexto necesario para saber que nos encontramos frente a una película de género, la cual irá subiendo de tono a medida que pasen los minutos. Y tiene razón. La historia es inquietante y perturbadora y utiliza la constante comparación entre los hombres y los animales (específicamente los perros) para llevar adelante la trama. No solo importa el diálogo, sino que los gestos tienen un lugar predominante.
Se maneja muy bien el ritmo del film, con una tensión y un suspenso constante, sin saber hasta dónde llegarán los protagonistas. Son imprevisibles, pero con un objetivo claro frente a ellos. Luciano Cáceres interpreta a Juan, en un papel que está acostumbrado a realizar; un cínico, border y obsesionado con los perros. Pablo Pinto, en cambio, encarna a Ismael, un personaje con menos luces, con más sentido del humor y quien sólo piensa en las necesidades básicas de un ser humano. El dúo que generan ambos personajes es uno de los puntos más altos del film.
“Corralón” pone foco en las desigualdades sociales, en la crítica al otro y en la profundización del lado oscuro del hombre, ese agujero negro inexplorado, donde subyacen nuestros peores pensamientos y deseos. Los personajes se encuentran en todo momento al borde de la locura, realizando todo tipo de acciones.
En síntesis, “Corralón” es una película de género, cuya estética y música generan el clima apropiado para que se desarrollen acciones inquietantes y perturbadoras. Con dos grandes actores como protagonistas, se aborda el lado salvaje del ser humano y las desigualdades en la sociedad.