Adonis creció a los golpes hasta que la esposa de su padre biológico decide adoptarlo. Ahora con una vida establecida de comodidad, siente algo en su interior que lo hace renunciar a su trabajo y cumplir su deseo; volverse boxeador y demostrar que puede hacerse un nombre sin usar la leyenda de su padre: Apollo Creed. Y para eso contara con la ayuda de un viejo conocido de su difunto papá.
Seamos sinceros, la gran mayoría pensamos lo mismo cuando nos enteramos que Sylvester Stallone volvía a calzase la ropa de Rocky Balboa; y es que ya no sabían como seguir exprimiendo con una saga y un personaje mítico, pero que ya no daba más de sí. Y qué lindo es cuando el cine nos cierra la boca de esta forma y uno tiene que tragarse sus prejuicios.
Esta película funciona tanto como secuela de la saga Rocky, como un claro inicio para una nueva franquicia, y como film independiente; pero siempre recordándonos al espectador que estamos sumidos en el mundo del Semental Italiano, y quizás ese sea su mayor acierto.
Así es como veremos miles de referencias a lugares o personajes conocidos, pero también la propia historia de Adonis tiene su sentido y forma. Si Rocky siempre nos habló de la auto superación y cómo ponerle garra y “pantalones” a la vida, Creed nos relata la búsqueda de identidad de su protagonista, y cómo debe hacer las paces con su pasado para poder aceptarse a sí mismo y construir un futuro.
Como suele ocurrir con las películas de Rocky, es mucho más importante la trama que las propias peleas, y pese a que el film por ahí se siente un poco innecesariamente largo, la construcción de la historia se va haciendo de a poco, con los guionistas Ryan Coogler (también director) y Aaron Covington tratando de darle un marco real a lo que va sucediendo, y presentando a los personajes secundarios y sus sub tramas sin apuros.
Creed: Corazón de Campeón
Pero si es un film de boxeo, también hay que hacer énfasis en las peleas, y en este apartado nadie se va a decepcionar. A los combates no les falta espectacularidad (si, ya sabemos que en la vida real al primer gancho de derecha cualquiera termina ko), pero en especial, se muestra bastante maestría técnica a la hora de filmar, en especial la primera pelea profesional que tiene Adonis, a estar atento si en el resto del año superan ese plano secuencia.
Otro de los grandes atractivos y que seguramente atraerá a la gran cantidad de espectadores que recibirá este film en las salas, es las múltiples nominaciones y premios que viene cosechando Sylvester Stallone, y si, desde este humilde lugar les decimos que al menos las nominaciones son totalmente merecidas. Pero no sólo Stallone está bien en su papel ya de mentor y consejero, el joven Michael B. Jordan se redime totalmente de Los Cuatro Fantásticos y logra un papel sólido, con el cual enganchar al espectador, y sobre todo, haciéndonos acordar a Apollo Creed cuando empieza a hablar de más y ser engreído.
Creed: Corazón de Campeón
Creed: Corazón de Campeón es una gran película, que si bien apela a la nostalgia del espectador, también tiene muchas virtudes para enganchar al público nuevo, y tiene la suficiente inteligencia como para ir plantando semillas para futuras y obvias secuelas. Los que son fans eternos de Rocky, van a salir contentos al ver una de las mejores entregas de la saga (lleven pañuelos, consejo gratis), los que nunca vieron ninguna de estas pelis, van a entender porqué tanto mito alrededor del personaje y seguramente querrán ver las demás.
Así sí se revive un clásico.