Aunque algo del punto de partida (hombre y mujer que inician una relación que declaran puramente sexual) ya estaba en "Una relación particular" hace más de una década, hay algo en el tono de este film que lo vuelve más interesante y más humano: el humor y la mecánica entre los dos personajes a la hora de conversar y volverse más que un cuerpo para el otro. Eso le otorga a la película un aura distinta.