A esta altura, Clint Eastwood es un prócer del cine y por ello cuesta objetarle cosas. Sé que si esta misma película hubiese estado dirigida (y protagonizada) por otra persona, mi percepción y evaluación serían diferentes.
Seguro que no entra en el top ten de su obra, pero Cry Macho me entró desde lo sentimental. Ese choque de dos mundos, las sutilezas y la manera en la que está narrada, hace que una historia simple se convierta en otra cosa.
Eastwood logró conmoverme una vez más y creo que por ahí va a pasar la recomendación de este film. Porque seguro que conmoverá a muchos.
Ojalá vos seas uno de esos espectadores.