En Cuando Oscurece el manejo de los tiempos es distinto a 36 horas, dando paso a una película introspectiva que se enfoca mucho más en las actitudes de Pedro y su relación con su hija; cuya la tensión irá en aumento a medida que se vaya descubriendo la verdad sobre el viaje hasta su explosivo climax en el tercer acto, con un final que reflexiona sobre como actos de los adultos exponen a los niños a peligros impensados.