Es cierto que año tras año aparecen una gran cantidad de documentales que refieren a una etapa oscura de nuestra historia, focalizando en los actos de la dictadura militar que gobernó al país entre 1976 y 1983. Sin embargo, hay menos que hacen referencia al proceso anterior, en los principios de los 70', cuando se esperaba la llegada de Perón como salida para una creciente necesidad de una militancia que se había vuelto activista y se enfrentaba sin tapujos al poder de turno.
Ese tiempo siempre es interesante de analizar, por el cruce ideológico que tenían las fuerzas enfrentadas y porque muchos de sus dirigentes forjarían su trayectoria política a partir de ese recorrido. Un tiempo de discusión en las universidades y fábricas, muerte, combate urbano y divisiones.
En ese contexto, llega "Cuarenta balas", que aborda el recuerdo y la investigación de los asesinatos de Jorge Fischer y Miguel Angel Bufano, militantes de Política Obrera (hoy, el PO), perpetrado por la Triple A en diciembre de 1974. Ellos (de 25 y 23 años respectivamente), eran jóvenes delegados de formación universitaria que se "proletarizaron" y formaban parte del cuerpo laboral de la fábrica de pintura Miluz.
La agencia de choque paraestatal los secuestró en la misma puerta de la fábrica, para matarlos en forma inmediata. Dos días después aparecieron en la zona de Dock Sud, con 30 balas en sus cuerpos.
Los directores, Ernesto Gut y Dionisio Cardozo, recogen testimonios valiosos y controversiales, entre los que se destacan familiares, dirigentes gremiales y abundante material de archivo. Hay en su posicionamiento mucha fuerza en sus planteos.
El film propone una discusión política fuerte en torno al rol de la Triple A y la coyuntura política que significó la vuelta de Juan Domingo Perón al país.
La riqueza de los testimonios es acompañada con otros recursos para componer el cuadro de situación de la época. Hay una edición rápida, intensa y que invita a adentrarse en el conflicto sin perder la atención en ningún momento. Gut y Cardozo han invertido tiempo en desarrollar la historia y eso se nota. Sin dudas, es un documento que impacta y actualiza debates que nuestra sociedad se debe.
"Cuarenta balas" no es sólo el retrato de dos militantes comprometidos y consecuentes, sino también un áspero recuerdo de cómo se vivían esos años, en los cuales la lucha ideológica, comenzaba a cobrarse víctimas de ámbos lados del tablero.
Una cinta incómoda y valiosa, compleja (porque reclama silenciosamente posicionarse frente a ella) que se transforma en un buen documento para conocer más sobre esos años.