Confieso que he vivido.
El 24 de marzo de 1976, día nefasto de nuestra historia si los hay, una joven ex guerrillera del Ejercito Revolucionario del Pueblo (ERP), confiesa su arrepentimiento frente a las cámaras de televisión en una conferencia de prensa, este hecho sucedió horas antes del golpe militar.
Esta noticia causó gran impacto de Mario Bohemeker, director del film, y permaneció en su mente durante varios años hasta que en el 2007, se entera que esta mujer, llamada Miriam P. sigue viva y está radicada en Israel, para ello acude a su encuentro y filma este documental que con recursos sencillos y minimalistas se vale de la mayor herramienta que contamos los humanos para narrar un relato: el lenguaje verbal...