Nueve cortometrajes de diez minutos y un solo tema, los derechos fundamentales
A 63 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y con motivo de celebrarse el Día Internacional de la Paz, se estrena esta propuesta conformada por 9 cortometrajes que -desde muy distintas ópticas, ideas narrativas y apuestas estéticas- reivindican derechos fundamentales como la vida, el trabajo, la igualdad de oportunidades, la salud, la educación y la libertad de expresión.
Ante la diversidad de temas y estilos, resulta imposible analizar D-Humanos como un todo (más allá de su bienvenida intención de concientización), pero este trabajo colectivo -aún con sus inevitables desniveles- tiene más logros que traspiés. Mariana Arruti ( Trelew ) apela en Mate o leche al punto de vista infantil y a un montaje vertiginoso a ritmo de murga para mostrar los pequeños gestos de solidaridad y disfrute durante un día en la vida de los habitantes de la villa 31 de Retiro. En el otro extremo, Carmen Guarini ( Tinta roja ) registra en el emotivo episodio Baldosas en Buenos Aires el homenaje que amigos y familiares de desaparecidos realizan con un recuerdo que queda impregnado en las propias veredas porteñas. El final -con anónimos transeúntes mirando y descubriendo los nombres- resulta una forma cinematográfica (y poética) de resistir el olvido y reivindicar la memoria.
También hay espacio para personajes (como Lidia López, una mujer misionera que dirige un comedor comunitario y tiene un programa en una radio comunitaria, en Dial , de Andrés Habegger); para temas controvertidos (la educación a los actuales cadetes del Colegio Militar, en La formación , de Andrea Schellemberg); para exponer la problemática del sistema penitenciario ( La tumba , de Lucia Rey y Rodrigo Paz); para denunciar el envenenamiento con plomo y el olvido al que es sometido el pueblo jujeño de Abra Pampa ( Sangre en el plomo , de Miguel Pereira); para retratar las formas de subsistencia ligadas al contrabando en pequeña escala en una zona fronteriza entre Paraguay y la Argentina ( Pasarela La Fraternidad , de Ulises Rosell); para analizar las marcadas diferencias sociales ( Informe sobre la inequidad , de Pablo Nisenson); y para regalar múltiples imágenes de la ciudad de Buenos Aires ( Objetos humanos , de Javier De Silvio) que funcionan a modo de separadores entre los distintos cortos. Diferentes aproximaciones a un tema común y necesario: la defensa de los derechos humanos