Deudas Humanas
Al cumplirse 63 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, se originó este proyecto colectivo que abarca nueve miradas distintas, a modo documental, sobre como se encuentra vigente y el cumplimiento de aquel emblemático documento firmado en París, allá por 1948, por la Organización de las Naciones Unidas.
Y el resultado es absolutamente deudor, la situación en la que viven algunas personas en nuestro país pone sobre el tapete que todavía falta mucho, y lamentablemente esta Declaración sigue siendo tan utópica como aquel entonces.
Este proyecto coral abarca nueve cortos documentales, de los cuales Objetos Humanos de Javier De Silvio funciona como separador entre uno y otro. Con distintas modalidades cinematográficas, presenciamos nueve realidades inquietantes, algunas llamativas y otras aberrantes. Aborda distintas problemáticas, que van desde el seguimiento con cámara en mano a unos niños de la villa 31; hasta entrevistas, algunas muy simpáticas, en un puente que cruza la frontera de Argentina y Paraguay.
El más destacable es el corto que abre el film: Informe sobre la Inequidad de Pablo Nisenson, una mirada introspectiva, a modo de investigación científica, entre dos muchachas adolescentes de la misma edad, pero venidas de cunas opuestas en la escala social. Podemos ver lo fenómenos biológicos, psicológicos y sociales que se entrecruzan y determinan prácticamente el destino de un sujeto, dependiendo de su entorno, prehistoria y condiciones de vida.
La Formación de Andrea Schellemberg muestra la interesantísima experiencia que es dictar clases de Derechos Humanos en el Colegio Militar. Dos mundos, miradas e ideologías opuestas se encuentran en la formación de los futuros militares argentinos. Un documento rico en relatos que incluye escenas reales en situaciones de examen.
Baldosas en Buenos Aires de Carmen Guarini (Gorri), es el más conmovedor. Cuenta un intento de recuperar la memoria, en las baldosas de alguna esquina porteña, con el nombre y el recuerdo de aquellos desaparecidos en la última dictadura.
El resto de los cortos apunta a escenarios de pobreza, la necesidad de alimentarse y sobrevivir, situaciones de torturas que sufren algunos presos en cárceles de la Pcia. de Buenos Aires o la monstruosa vivencia de tener plomo en la sangre producto de la contaminación fabril.
Algunos impactarán bastante, otros no presentarán mayor novedad en su estilo, pero D-Humanos es un proyecto que vale la pena ser visto, inquietarse, reflexionar y preguntarse cuál es el rol que tenemos como sociedad para que todos hagamos que esa Declaración no sólo quede en lindas palabras y pueda ser una realidad algún día.