Rydal (Oscar Isaac) es un jóven que vive en Grecia tras la muerte de su padre. Trabaja como guía para ganarse la vida, y un dí se topa con una pareja encantadora, que vacaciona por el mediterráneo. Sin embargo, esconde secretos que terminan por estallar, y se encontrará huyendo con ellos por amor, hasta llegar a las últimas consecuencias.
En pocas líneas podemos resumir el argumento de un filme de apenas una hora y media de duración, y al leerlo nos viene un deja-vu: hemos visto el mismo argumento otras veces. Una pareja que esconde secretos, un joven inocente que se enamora de la chica equivocada y una persecución contra el tiempo antes de que los secretos exploten. Acá en esta ópera prima del director Hossein Amini, se basa en una novela de Patricia Highsmith.
Para no hacer más larga de lo necesario esta mini-reseña, sólo diremos que lo único que vale la pena son las actuaciones de Viggo Mortensen, Oscar Isaac y Kirsten Dunst, pues la misma historia está llena de clichés y desde el
principio resulta previsible lo que pasará con el triángulo amoroso. Como ópera prima queda a deber.