¿Comedia sexual para una noche de verano?
De amor y otras adicciones (Love and Other Drugs, 2010), la nueva película del realizador Edward Zwick (Desafío, Diamante de sangre, Valor bajo fuego) podría catalogarse como una comedia, pero que se corre del eje cuando vira hacia la profundidad y la moralina, descontextualizando el conflicto inicial. Lo que empieza siendo pasatista y banal se convertirá en un fallido dramón sobre el Mal de Parkinson.
El film ambientado a mediados de la década del 90 nos presenta a Jamie Randall (Jake Gyllenhaal), un visitador médico al que le cuesta comprometerse con el sexo opuesto. Mujeriego y ambicioso sus únicas metas parecieran ser el sexo y el dinero. Anne Hathaway es Maggie, una bella mujer a la que le diagnosticaron Parkinson precoz y a la que también le cuesta comprometerse con los hombres, buscando sólo relaciones ocasionales. Ambos se encontrarán y obviamente lo que empieza siendo sexual se convertirá en amor. En el medio de la historia el surgimiento del Viagra, la guerra farmacéutica y la lucha de una mujer con Mal de Parkinson. Extraña mezcla, ¿no?
Claramente el film se desdobla en dos partes. Durante la primera mitad será la comedia y el sexo quienes dominen la historia por completo. Ambos actores hacen uso y abuso de sus cuerpos bien dotados para aparecer desnudos en cámara casi como si se tratara de un bock de venta sexual. Sin justificativos alguno las escenas de cama se apoderarán de esta parte de la trama en donde se apelara al gag fácil y trivial para conquistar al espectador.
A pesar de todo lo enumerado, los problemas reales de la película no son las escenas de sexo reiteradas, los desnudos innecesarios y los chistes tontos, sino el brusco giro que se produce cuando el Mal de Parkinson pasa a ser casi el protagonista excluyente. Es ahí cuando lo que hasta el momento era una simple comedia de verano apela al recurso moralizador redimiendo a los personajes de sus banalidades superfluas para volverlos seres comprometidos, no sólo con ellos mismos sino con el mundo que los rodea.
Basado en el best seller Hard Sell: The Evolution of a Viagra Salesman, del autor Jamie Reidy De amor y otras adicciones se nutre de dos actores consagrados, jóvenes y sensuales para atraer público en base a una campaña promocional basada en lo sexual, pero que a pesar de su cometido termina naufragando por no querer pecar de superficial y adentrarse en la profundidad de una historia que dentro del contexto que se la presenta queda fuera de lugar. Un fiasco que además aburre.