Esta historia viene de la mano del Director, Productor y Guionista Rosendo Ruiz (44), se presentó como pre-estreno en los Festivales de Mar del Plata y Pinamar, la producción ejecutiva a cargo de Inés Moyano y obtuvo una muy buena convocatoria ya la vieron más de 10 mil personas en Córdoba y ganó el Premio del Público en el último Festival de Mar del Plata.
Todo comienza cuando Juan Cruz (Francisco Colja), un fotógrafo de clase alta de Córdoba, más acostumbrado a las fiestas electrónicas, vive en un mundo de lujos, sus amigos viven en lujosas casas de countries; este trabaja para una agencia de publicidad y le encargan un trabajo, tomarle fotos a la “Mona” Jiménez para ser usadas en la gráfica de su nuevo disco.
Este joven ingresa en un mundo desconocido para él y descubrirá otro mundo, allí conoce a una joven atractiva Sara (Johana Pereyra), ellos van a su casa y estudio, allí le saca varias fotos muy sensuales, pero todo ese momento se ve empañado cuando recibe un llamado telefónico y a partir de ahí descubre que le robaron y le dice a su amigo por teléfono: “Seguro que fue uno de estos negros de mierda”, es cuando Sara decide irse.
Ahora Juan Cruz asume todos los riesgos para recuperar su cámara, sin dar parte a la policía; se mete en la casa de la travesti Penélope (Martin Rena), de ahora en más se involucra en un mundo desconocido y delictivo, junto con Maxtor (Rodrigo Savina) y Sara; los cuatro son un cuarteto delirante y todo esto se suma el personajes muy bien logrado de Laucha (Gustavo Almada) la ex pareja de Sara, quien lucha constantemente para recuperarla.
Es un film dinámico, una buena construcción de los personajes y su narración, existen varias escenas buenas pero hay una que se luce Saviana bailando merengue (graciosa), disfrutable para todos los espectadores, con ese humor cordobés (muchos conocimos el mismo por ejemplo a través de El Negro Álvarez), tiene aventura, intriga, amor, drama, cruces sociales, toca la discriminación y técnicamente lograda (planos, cámara fina, entre otras).