Ganadora del Premio del Jurado en Cannes, la película del japonés Hirokazu Kore-Eda se centra en una pregunta difícil: ¿debemos elegir al hijo biológico o al que uno creyó suyo durante seis años de crianza? Pero a pesar de la seriedad de la premisa, Like Father, Like Son está narrada en tono de comedia.
Llena de situaciones entrañables y graciosas, la elección de no enfatizar el drama es el mayor acierto de la dirección. El carácter ameno y simpático de la película hace que el espectador se involucre tanto más en la problemática de sus personajes, consiguiendo que las escenas dramáticas sean mucho más poderosas. La familia es un tema recurrente en las películas de Kore-Eda. Like Father, Like Son está inspirada en sus propias dudas sobre la paternidad: ¿qué convierte a uno en padre, el lazo de sangre o el tiempo pasado con el hijo?...