La película de la vida misma
"La guerre est declaree" es una propuesta francesa distinta e innovadora, que nos cuenta la historia de una pareja que debió hacerle frente a la desgracia de tener un hijo de tan sólo 18 meses con un tumor en el cerebro. No, esto no es lo innovador; lo realmente distinto es que el film fue protagonizado por la pareja real que debió transitar la enfermedad de su hijo, la directora/actriz Valérie Donzelli y el actor Jérémie Elkaïm, transmitiendo en primera persona la explosión de sensaciones que debieron vivir ante una situación como esta. Alegría, amor, impotencia, desesperación, esperanza y euforia, entre otras emociones, tiñeron el metraje de tonalidades de la vida misma que dieron al espectador una experiencia cinematográfica interesante y difícil de repetir.
Lo mejor de la película es que se trata de una puesta honesta, sin golpes bajos ni toques magnánimos de superproducción, por el contrario, Donzelli se encarga de presentar la historia con un criterio muy austero pero eficaz. Así mismo, la sofisticación y el buen manejo de la edición y musicalización hicieron que el ritmo escape a las clásicas secuencias aletargadas del cine francés, manteniendo la personalidad cinéfila parisina pero entregando a su vez una versión más moderna de la misma, con ediciones más frenéticas de las secuencias y con una combinación de música clásica y electro que marcaba la dinámica.
Lo no tan bueno del film, a mi criterio, tuvo que ver con parte de esta modernización aplicada por la directora, que si bien marcaba un ritmo más llevadero de la película, por momentos se volvía un tanto "pop" de más, haciendo algunas autorreferencias personales sobre la sexualidad y la escena under parisina, que no estaban para nada mal, pero que poco tenían que ver con la historia central. Por momentos también se juega con el musical (no se preocupen, es sólo una breve escena) y se utilizan algunos artefactos "cool" del cine para darle un aire más artístico. ¿Aportaron finalmente coolness al film? Sí, ¿también le aportó frivolidad? También. En mi opinión, bajarle un poco el tono al recurso frívolo habría producido un efecto más positivo en el espectador, sobre todo en aquel que estaba más enganchado con la historia de superación de la enfermedad del niño y no tanto en la historia de amor entre Romeo y Julieta, sí, también se pusieron esos nombres para el film.
Como cierre, diría que es un buen entretenimiento, innovador y sincero, que estará más cerca de gustar a los habitués del cine independiente y francés, que a los amantes del drama mainstream.