FELISA (Beatriz Spelzini), llega al pueblo para ocupar una vacante de enfermera. Allí, el director del hospital le conseguirá un lugar donde vivir.
AMADO (Hugo Arana), hosco y huraño, posee dos casas lindantes y gemelas: una ocupada por él y la otra deshabitada. A cambio del alojamiento,le pedirá una colaboración en las tareas de su casa. Felisa acepta y al presentarse ante él, descubrirá que Amado es ciego, aunque su ceguera es el mito del pueblo. Dos almas solitarias que se encuentran para torcer sus destinos, en un pueblo donde nunca pasaba nada, hasta ese momento...