Depredadores marca la vuelta al cine de una de las cintas de culto que supo conquistar a muchos fanáticos a fines de los '80.
Nimród Antal, bajo la ardua supervisión de Robert Rodriguez, logra un producto muy bien terminado, que a pesar de tener ciertos detalles, entretiene desde el minuto uno hasta las escenas finales.
Depredadores arranca con un Adrien Brody en caída libre a una desconocida jungla. Desde allí nos va introduciendo poco a poco en esa misteriosa selva, para ir develando los detalles de la trama, que obviamente no representa sorpresas, pero no por eso deja de ser una efectiva e interesante película de acción.
Hay un buen laburo de Rodriguez y Antal en el encare y el respeto que le dieron a la historia, porque a muchos podrá o no gustarle, pero nadie puede decir que no respeta la esencia del film protagonizado por Arnold Schwarzenegger en 1987. Y esto no es un detalle menor, porque cuántas veces Hollywood en su afan por engrosar sus arcas ha destrozado excelentes propuestas del pasado...
El cuidado trabajo para respetar la franquicia se puede ver también en la forma en que se rodaron las escenas de acción, donde se puede ver como la animación computada solo se utilizó para mejorar detalles y no para basar una secuencia en ese recurso.
Lamentablemente por momentos decae el suspenso que el director creó al comienzo, de la mano de algunas obviedades que van ocurriendo, pero esto no modifica en demasia el resultado final.
Quiero aclarar que pongo a Robert (productor) a la altura de Nimród (director) porque incluso en las introducciones de los trailers, el realizador de El Mariachi y Planet Terror se encarga de presentarla como "su" nueva película.
Realmente da un placer enorme ver a un pedazo de actor como Adrien Brody al frente de una cinta de este género, porque le da un salto de calidad muy importante. La versatilidad de Brody es lo que llama más mi atención debido a que el tipo puede llevar adelante un dramón como El Pianista, una comedia como Los Estafadores o ahora Depredadores, siempre con una soltura, naturalidad y excelencia que son dignas de un actor con un gran talento.
Obviamente que los actores secundarios, encabezados por la brasileña Alice Braga, dan buenas actuaciones acompañando a un gran maestro de ceremonias como lo es Brody.
Un "detalle de color" es que por momentos Depredadores me recordó a Lost, debido a los misterios sobrenaturales que tiene dicha selva. Incluso al comienzo uno de los protagonistas esboza una frase “¿Y si estamos todos muertos?”, una clara alusión, que sospecho fue intencional, a dicha serie.
En conclusión Depredadores es una más que digna vuelta para estos extraterrestres que supieron ganarse el corazón de muchas personas.