Un ataque sorpresivo de la policía en Detroit en 1967, da lugar a uno de los disturbios raciales más grandes de la historia de Estados Unidos. La historia se centra alrededor del incidente del Motel Argiels, que ocurrió en Detroit, el el 25 de julio de 1967. El hecho involucra la muerte de tres hombres afroamericanos y golpes brutales a otras nueve personas: siete hombres negros y dos mujeres blancas.