Esta semana llega a nuestros cines la película Dog: Un viaje Salvaje, es un film dirigido por Reid Carolin y Channing Tatum, quien también es el protagonista de esta historia junto a la perra Lulu.
Briggs es un ex Ranger que debe realizar un viaje con la indómita perra Lulu a través de la costa del Pacífico para llegar al funeral de un viejo compañero si quiere volver a ser parte del ejército. Lo que Briggs no sabe es que la perra Lulu lo meterá en varios problemas.
Lo primero que debemos decir sobre Dog: Un viaje Salvaje, es que estamos ante una película de superación y agradecemos mucho que se trate de una aventura y no de una cinta que utiliza golpes bajos para sensibilizarnos. Quien escribe debe sincerarse, no me gustan las películas tristes sobre animales y al empezar a ver Dog: Un viaje Salvaje, tenía miedo de que termine como muchos films sobre mascotas. Por suerte este no es el caso y cuando terminamos de verla salimos del cine con una gran sonrisa.
Carolin y Tatum ya llevan varias películas trabajando juntos y se nota que tanto director como actor se entienden. Esta vez, ambos dirigen y si bien se siente como un producto de estudio debemos admitir que cumple sin necesidad de la marca de autor. Dog: Un viaje Salvaje, es una película de carretera, un viaje lleno de peripecias con dos personajes rotos y esto es lo más interesante de la cinta. Tanto Briggs como Lulu sufren de estrés post traumático debido a la guerra de medio oriente, algo que ya se ha visto en varias películas, pero en este caso se centra en la vida cotidiana de los personajes y como se ven afectados por esos traumas y por una cierta necesidad de seguir en el ejército como única forma conocida de vida, eso es lo que tanto humano como animal deben superar y lo bueno es que la película lo muestra de una manera natural y vemos el crecimiento de los personajes.
Ahora bien, Dog: Un viaje Salvaje, tiene sus fallas al no profundizar demasiado en algunos aspectos por centrarse más en la adrenalina del viaje y los cambios entre el drama y el humor no sale bien parado en todos los casos. A su vez las actuaciones son pasables, pero nadie destaca, ni siquiera el protagonista. De todas formas, eso no llega a opacar demasiado el producto final.
Dog: Un viaje Salvaje es una entretenida película para los amantes de los animales, donde vemos la relación, el crecimiento y el amor mutuo entre ambas especies. Es una película recomendada para aquellos que les guste la aventura, el drama y el humor, que por suerte tiene un final feliz.