Dos armas mortales
El islandés Baltasar Kormákur vuelve a Hollywood con Dos Armas Letales (2 Guns) luego de filmar en su país de origen la asfixiante Lo Profundo (estrenada en el último Festival de Mar del Plata) con este thriller que lo vuelve a unir con Mark Wahlberg después de haber trabajado juntos en Contrabando (Contraband), que lamentablemente en nuestro país fue enviada directo a DVD.
Dos Armas Letales seguirá la historia de dos agentes de la ley de encubierto detrás de un poderoso narcotraficante de México. La cuestión es que estos agentes no trabajan juntos y de hecho no conocen que uno colabora con la DEA y otro con la Inteligencia Naval. El problema para ellos se desata cuando roban unos cuantos millones de dólares ubicados en un pequeño banco de los Estados Unidos y sus identidades salen a la luz, poniendo un importante precio a sus cabezas por parte de la mafia, un misterioso agente y sus propias agencias que quieren silenciarlos para que tamaño desastre no salga a la luz.
Este nuevo film de Kormákur se basa en la novela gráfica homónima publicada por Boom! Studios y parte desde la citada historia para desplegar un interesante thriller con muchos condimentos cómicos que luego derivarán en una buddy movie influenciada por aquel film de Michael Bay llamado Bad Boys. Sí, las firmas de Bay como la ampulosidad, los planos cancheros y los helicópteros sobrevolando los cielos son únicas de su cine (?) y por eso Kormákur sólo toma como referencias el tono cómico y la importancia de girar toda la maquinaria alrededor de la pareja protagónica, aunque a veces la fuerce un poco con algunas vueltas de tuerca algo innecesarias. Si desglosamos el nombre para nuestro país de Dos Armas Letales veremos que causalmente o casualmente corresponde a la citada Bad Boys (en España llamada Dos Policías Rebeldes) y también con Arma Mortal (que sería Lethal Weapon, pero cuya traducción literal es Arma Letal). Es que 2 Guns toma como punto de partida las citadas ideas del film de Miguelito Bahía, pero la relación de la pareja protagónica se corresponde bastante más a la buddy movie policial por excelencia que protagonizaron en el pasado Mel Gibson y Danny Glover.
Allí en los clásicos de Richard Donner había un protagonista que seguía los procedimientos de manera minuciosa y el otro que era pura espontaneidad y locura. Acá en Dos Armas Letales encontramos un contrapunto y una amistad a desarrollar entre ambos al igual que en las Arma Mortal, algo que las distancia de las obras de Bay porque allí sus estrellas ya cuentan con una estrecha relación. Mark Wahlberg y Denzel Washington presentan un mismo objetivo (salvar su vida principalmente) y maneras totalmente opuestas para llevarlo a cabo. Están en ese tironeo cómico de quién la tiene más grande, el humor negro y en el entramado, traiciones y delirio de su historia, las principales virtudes de la película que presenta a un Marky que sigue en su franco ascenso y vuelve a demostrar que la comedia es un género que le queda cada día mejor y a un Washington que regresa para sacar a relucir ese característico carisma con un papel que es resultado de la mezcla del Tobin Frost de Protegiendo al Enemigo (Safe House) y el Alonzo Harris de la excelente Día de Entrenamiento (Training Day).