Dos locas y una sola buena actriz en fuga
Una mujer policía debe participar de la escolta a un contador y su esposa para que declaren contra el jefe de un cartel narco. Pero las cosas salen mal y la diminuta y varonil agente debe huir junto con la sofisticada exreina de belleza colombiana perseguidas tanto por policías corruptos como por sicarios narcos que obviamente no quieren que la mujer testifique.
Como "Dos locas en fuga" es una comedia disparatada con un ángulo femenino, el guión se preocupa más por hacer chistes con la esquemática disparidad entre las dos protagonistas que por cualquier otra cosa, como por ejemplo la construcción argumental que es bastante floja. Reese Witherspoon es la policía que prácticamente creció en el patrullero manejado por su papá (de hecho lo mejor del film es la secuencia de créditos en la que se ve cómo una nena va creciendo en medio de las pesquisas de su padre uniformado, aprendiendo perfectamente los números de código de cada delito) y que no consigue novio, ni tampoco respeto de sus colegas debido a un pintoresco incidente con una pistola eléctrica aplicada con muy poca suerte. Sofia Vergara es la ultrafashion esposa del narco que no puede dejar su maleta llena de zapatos carísimos ni aun cuando su vida corre peligro.
A lo largo de esta road movie hay algunos buenos chistes en medio de muchos gags bastante medianos, y tampoco está muy cuidado todo lo que tiene que ver con la acción propia de una comedia policial. Los mejores momentos están a cargo de Reese Witherspoon que, como buena comediante, está muy por encima del nivel de la mucho más sexy pero también sobreactuada Sofia Vergara.
Un detalle curioso es el uso intensivo del castellano en muchas más escenas que en la típica comedia hollywoodense, incluyendo verborrágicas discusiones en español entre la pareja estelar. La potente banda sonora rockera de Cristophe Beck da un poco de dinamismo a un asunto que da más para un zapping en el cable que para la pantalla grande.