Un cálculo con probabilidades
La película que trae nuevamente a la actuación a Adrián Suar y un gran elenco, acertado como anillo al dedo, es una comedia sencilla y superficial, pero efectiva y entretenida cuya principal virtud radica en la propuesta temática.
No es precisamente el abordaje del movimiento swinger (intercambio de parejas) y todo lo que ello significa en el marco de una sociedad que aparenta profesar más de lo que ejerce, sino la intención de jugar con la curiosidad, la fantasía y una serie de preguntas que de allí surgen lo que moviliza el relato manteniendo viva la atención del espectador.
La simpatía de los personajes, interpretados con gran naturalidad, y el uso de un lenguaje cotidiano hacen de las peripecias de estas dos parejas swingers y sus anécdotas tragicómicas una divertida comedia que sobre el último tramo del relato vira en lo previsible y decae, con un final feliz pero poco convincente para una historia que de todas formas poco intenta contar.
Técnicamente correcta y con desnudos muy cuidados, Dos más Dos, suma en la fluidez del relato y la empatía de sus personajes con el público, pero resta en el superficial abordaje de una práctica que existe en nuestra sociedad pero que culturalmente aún debe superar varias barreras.
Un film que responde a la perfección los cánones televisivos para transformarse, si lo quisiera, en un nuevo producto Polka de la próxima temporada. Tal vez a la salida (café de por medio, en un bar, o quien sabe dónde), si la vio en pareja, debata sobre sus fantasías, el miedo a los cambios y que pasaría si……, cómo sería la reacción... y mucho más que sólo sabrán después de verla.