Dúo

Crítica de José Carlos Donayre Guerrero - EscribiendoCine

Dúo (2023), dirigida por Meritxell Colell Aparicio, es una película dramática que aborda el arte y la naturaleza. Con una estética que combina elementos documentales y de ficción, se nos presenta una emotiva narrativa sobre los recuerdos y la relación de los protagonistas.

Mónica (interpretada por Mónica García) y Nicolás (interpretado por Gonzalo Cunill) son una pareja dedicada a la danza contemporánea, quienes presentan su obra en diversos lugares. Deciden realizar una presentación en pueblos ubicados en la Cordillera de los Andes, en el norte de Argentina, durante los Carnavales, una festividad en la cual todos los pueblos se preparan para el evento. Este viaje se convierte en un camino hacia los recuerdos y hacia la situación actual de la pareja después de muchos años juntos. Además, les brinda la oportunidad de conectarse con una región natural que posee sus propias tradiciones y costumbres.

Resulta interesante que la narración se construya mediante la fusión del registro visual de la ficción y el documental. La representación de la Cordillera de los Andes y de sus habitantes se muestra con un enfoque onírico, formando parte de los recuerdos y relatos personales de Mónica. Por lo tanto, estas representaciones son parte de la ficción.

Al mismo tiempo, se muestra de manera documental la gente de cada pueblo, sus costumbres, sus relatos y todo lo relacionado con los Carnavales. Del mismo modo, la actividad de la pareja y su situación sentimental se presentan desde una perspectiva de ficción, mientras que lo documental surge del encuentro con el entorno geográfico en el que se encuentran. De esta forma, el relato se desarrolla a través de la constante relación visual entre la ficción y lo documental, mostrando primeros planos y utilizando una cámara cercana a los personajes. Asimismo, el relato se construye a partir de la interacción entre diferentes elementos, como el espacio natural, la danza contemporánea y la situación de los protagonistas.

Es fascinante que la construcción de una historia sobre viajes en la Cordillera de los Andes refleje cómo el espacio da forma al viaje interior de los personajes. A través del contacto con el entorno, se muestra una historia de transformación para cada uno de los protagonistas. Desde el silencio y el encuentro con las tradiciones culturales, el relato utiliza el enfoque documental del retrato para mostrar rostros y animales, y el espacio mismo se convierte en un protagonista. De este modo, las imágenes de los lugares y sus habitantes forman parte de los recuerdos, pensamientos y situaciones sentimentales de la pareja protagonista.

En definitiva, se trata de un relato concreto y personal sobre un espacio geográfico y la historia de la relación sentimental de una pareja, presentada a través de la interacción entre la ficción y lo documental, basada en la relación entre un espacio natural y los personajes principales.