El riesgo de apostar al pasado
El motivo para ver El aprendiz (caprichoso cambio local para el título original The November Man) sin duda es su protagonista Pierce Brosnan. Aún recordado por su trabajo en la serie Remington Steele, pero más famoso por haber interpretado a James Bond en la pantalla grande, Brosnan intenta acá hacer el rol del veterano que conoce todos los trucos. Un estilo de film en el cual muchos actores han logrado encontrar una segunda oportunidad para sus carreras. Su carisma es indiscutible, su rol como un agente de la CIA retirado está bien. Pero exactamente lo contrario ocurre con Luke Bracey, que interpreta a un ex discípulo de Brosnan, ahora enfrentado a él. El enfrentamiento del guión es igual al de la pantalla: un actor veterano que sabe hacer las cosas bien, contra un iniciado muy seguro de sí mismo, pero por debajo del talento del otro. Con un guión lleno de vueltas de tuerca, no hay que anticipar todas las subtramas, incluyendo la que lleva adelante Olga Kurylenko. El aprendiz, historia de acción y espionaje, está dirigida por Roger Donaldson, experimentado director de clásicos como Sin salida (1987) y Motín a bordo (1984) con Kevin Costner y Gene Hackman, entre otros títulos de una despareja, pero no descartable filmografía. El vínculo veterano-joven se dio varias en sus en sus películas, generando duelos actores interesantes que lamentablemente aquí no se repiten. Esta película al estilo de la vieja escuela tiene algunos ingredientes clásicos: misiones fallidas, rescates, huidas, venganzas, secretos, tramas que incluyen políticos y un uso actualizado de la tecnología, aunque se trate de elementos tardíos de los films de la guerra fría. Tal vez apostar al pasado sea una puesta con algo de riesgo en los tiempos que corren, pero eso no asegura que la película se distinga de otras. Mel Gibson, Bruce Willis, Kevin Costner e incluso Liam Neeson han logrado conectar con el público en esta clase de títulos. Público que no quiere héroes de comic sino del viejo cine de acción y espionaje. Para ellos, El aprendiz puede que funcione, aunque se trate de un exponente muy menor de un viejo género.