El director, productor y guionista Craig Macneill es el responsable de este thriller psicológico, que narra una historia basada en hechos reales, y de la cual tuvo un contacto muy particular durante su niñez en Nueva Inglaterra, al vivir cerca de Fall River, lugar donde transcurre la misma. Durante su infancia, el asesinato de la familia Borden era un tema que se solía tocar cuando se hablaba de homicidios e historias aterradoras, sin embargo, el director de “The boy” (2016), decidió encarar el filme para contar, mas allá del asesinato en sí, las condiciones sociales y personales que rodeaban a Lizzie Borden, personaje principal del relato.
Ambientada en 1892, “El asesinato….” nos presenta a los Borden, una poderosa familia de cierto nivel conformada por un padre dominante, su esposa, y dos hijas adultas que sufrieron no solo la pérdida de su madre, sino que también deben lidiar con la figura autoritaria de su padre. Lizzie (Chloe Sevigny), una de las hijas, no solo lleva una vida claustrofobica y solitaria, si no que sufre ciertos ataques que aparentemente no tienen una explicación médica: las peleas con su padre y su particular forma de ver la sociedad en la que vive la vuelven “la oveja negra” de la familia. La inesperada llegada de Bridget Sullivan (Kristen Stewart) cambiará la cotidianidad de Lizzie, y le dará el impulso y la confianza para llevar adelante una serie de decisiones que sola no hubiera podido afrontar.
Macneill logra construir este vinculo a lo largo de la película con planos que recorren la intimidad de los mundos de ambos personajes y lo que pasa entre ellos cuando se encuentran, el director no le teme a la escenas arriesgadas, al contrario, las utiliza de forma inteligente y en buena dosis, evita lo obvio y no abusa de los recursos que plantea. Los flashbacks y flashforwards se complementan con el relato, que se toma su tiempo en profundizar con detalle las expresiones corporales, faciales, y los planos cortos que exhiben las emociones que los personajes atraviesan.
El trabajo ambientación y dirección de fotografía son dignos de destacar, y mas allá de que la película no nos invita a recorrer diferentes locaciones (pues la historia se desarrolla prácticamente en la casa de los Borden), se logra crear el clima de intimidad y angustia que el relato contiene. Los trabajos de interpretación y composición de Chloe Sevigny y Kristen Stewart son impecables.
“El asesinato…” es un filme muy bien logrado, que logra generar suspenso y seducir con sus actuaciones.
Calificación: Muy buena.
Manuel Germano