Hasta ahora, venía postergando la posibilidad de ver "The Green Hornet" por una simple razón: Seth Rogen.
Este insoportable, sobrevalorado y limitado actor surgido de la factoría Judd Apatow es el principal responsable de esta fallida adaptación llevada a la pantalla grande del superhéroe enmascarado que nació en la radio y luego tuvo su serie en la TV de los años 60.
Como productor y co-guionista, Rogen intenta balancear la acción y la comedia creando una película que pretende (sin conseguirlo) acercarse a "Iron Man", presentando un guión cargado de gags poco graciosos y totalmente centrado en su irritante personaje del millonario narcisista devenido en superhéroe, no sabiendo aprovechar la elección de un talentoso y atípico director como Michel Gondry ("Eternal Sunshine of the Spotless Mind") para que aporte su particular sello a una producción pochoclera, ni tampoco logrando sacarle jugo a un desperdiciado elenco secundario conformado por Christoph Waltz (interpretando a un caricaturesco malvado, difícil creer que sea el mismo actor que ganó un Oscar por "Inglourious Basterds"), Cameron Díaz (como la asistente del millonario, un rol que no aporta nada) y Tom Wilkinson (como el padre, apenas aparece en un par de escenas).
Como actor, Seth Rogen vuelve a interpretar el mismo personaje infantil que viene haciendo en todas sus películas, esta vez aplicado al rol de un superhéroe sin atributos que no le encaja por más que haya adelgazado algunos kilos. Con muy poco, el taiwanés Jay Chou consigue opacarlo en el papel de su ayudante.
"The Green Hornet" es otra floja adaptación dentro del inagotable mundo de los superhéroes.