El cinéfilo clásico (¿quedará alguno?) recordará a Tyrone Power en la primera versión de este melodrama noir donde un falso vidente de circo llega a los círculos de poder de una gran ciudad apoyado por una psiquiatra que es bastante más mala y manipuladora que él.
Empecemos de menor a mayor: Bradley Cooper no es (cédula aparte) Tyrone Power. Pero Cate Blanchett está mejor que Helen Walker.
Film de tiempos que hoy ya no se usan, respeta con talento un género perfecto.