Podría decirse que el arte culinario es complementario al cinematográfico, al nivel de los sentidos. Mientras que el segundo cautiva la mirada y el oído, el primero acapara el resto de los órganos sensoriales. El olor de la comida, sobre todo el sabor y la diferencia de las texturas de la misma completan la escala de los 5 sentidos.
El segundo largometraje de Philip Barantini une estos dos mundos tan similares como diferentes. “El Chef”, llega a las salas de cine este jueves 6 de septiembre, tras un extenso paso por festivales durante el 2021. Contando con el protagonismo del espectacular Stephen Graham y su marcado acento escoces.
Andy es el chef que se encarga de la cocina de uno de los restaurantes de moda en Londres. Durante la noche más concurrida del año, debe maniobrar entre crisis personales y profesionales para que nada se vaya a pique. Todo lo que podría pasar en un restaurante sucede en esta noche problemática.
Barantini apuesta y acierta de sobremanera en la principal propuesta formal del audiovisual. Mediante un plano secuencia único, ingresamos al universo culinario de una noche de un restaurante explotado. La cámara salta de un personaje a otro, con un dinamismo interesante. Al no contar con cortes o planos decorativos, el espectador se ve obligado a estar conectado con la película constantemente, sin descanso. Lo cual es por momentos agotador, pero sin embargo logra transmitir la adrenalina, tensión y malestar de los personajes que habitan el encuadre.
La trama se desliza al igual que lo hace la trama, brindando minutos a todos los personajes. Lo cual saben aprovechar a la perfección los actores, que se lucen cuando les toca hacerlo y acompañan cuando la cámara no los sigue. Y aunque la noche de Andy pareciera estar gobernada por la ley de Murphy a la negativa, en ningún momento el guión se exacerba poniendo algo de más.
“El Chef” de Philip Barantini, tal vez no fue afortunada al momento de elegir la semana de estreno, ya que compite con muchas otras grandes producciones. De todas maneras se presenta como una gran alternativa o primera gran elección para aquellos espectadores que gusten de ver películas más pequeñas. Una narrativa sólida y un gran acierto técnico/estético lo validan por sí solos.