Muchos conocemos a las bandas de las cuales se encargó la discográfica independiente Casablanca, cantamos y bailamos sus hits. Pero seguramente nadie escuchó jamás el nombre de Neil Bogart, la persona detrás de todos los discos de oro. “Disco de oro” es la biopic de este hombre, dirigida por uno de sus hijos, Timothy Scott Bogart. Aterriza hoy mismo, jueves 1 de junio en la cartelera de todos los cines. A priori la vida de Neil Bogart no nos dice nada. Pero cuando indagamos y vemos que fundó el sello Casablanca Records comienza a ponerse interesante. Entre otras cosas se encargaron de llevar a Kiss a lo más alto de la música rock y sacar la gran mayoría de los hits de la música disco, por no decir que inventaron el género. Con más globos de oro que años de vida en este mundo, Neil es un pilar oculto de la música tal cual la conocemos. Hollywood tiene una obsesión por dedicarle películas a personas cuyos logros no recibieron la atención suficiente en su momento. Y muchas suelen derivar en un gran éxito económico. Una persona de clase media consigue salir del barrio en que nació y hacer mucho dinero a base de trabajo y dedicación. ¡Viva la meritocracia! Sin embargo, detrás siempre hay alguien con grandes bolsillos subvencionando los sueños del protagonista. Suelen ser historias interesantes. Pero en este caso el montaje hace que todo sea algo confuso. Va y vuelve en el tiempo de manera desordenada durante toda la primera mitad. Se utilizan muchas puestas digitales que tampoco están bien logradas, se notan falsas y baratas. Además el arco del personaje siempre está atravesado por el dinero y nunca se explica exactamente en qué lo gastan o como lo invierte. Para el momento en que debemos empatizar, el sentimiento de aversión predomina. Dentro de un género donde con poco se puede hacer mucho, “Disco de oro” de Timothy Scott Bogart se queda corto. De extensa duración, arcos narrativos débiles y algunos golpes bajos atentando a la emoción del espectador. No deja de entretener de todas maneras. Sin embargo carece de la épica suficiente para ser una historia memorable.
“Conspiración Divina” de Tarik Saleh. Crítica. Intrigas y misterio hay en todos lados. Francisco Mendes Moas Hace 6 horas 0 9 Tras un exitoso paso por los festivales de cine del mundo, llega a los cines de argentina “Conspiración Divina” de Tarik Saleh. En la edición 2022 de Cannes se consagró con el galardón a mejor guión. Se estrenó en una semana complicada entre películas de Marvel y otras de grandes directores argentinos, sin embargo se presenta como la que viene ocupar el lugar excéntrico en la cartelera. Proveniente de una humilde familia de pescadores, Adam es becado y puede concurrir a la prestigiosa universidad de Al-Azhar de El Cairo. Epicentro del poder del islam. Apenas comenzadas sus clases el Gran Imán fallece, dejando acéfalo el centro de poder. Desde este punto se ve involucrado en una intrincada lucha de poder y codicia entre el gobierno y las altas esferas religiosas. De manera inteligente, la película se encarga de enseñar al espectador el funcionamiento del universo islamico, sobre todo para los occidentales. Sin embargo una vez aprendidos, descubrimos que no se trata de una problemática que tenga que ver específicamente con la religión, sino con el poder. Y este pareciera tener la misma cualidad que las matemáticas, funciona igual en todo el mundo. Maneja muy bien un concepto fundamental en este género de películas. La dinámica títere/titiritero pareciera no tener fin, llegando un punto en que no se sabe quién maneja los hilos de que. Como supieron hacer Hansel y Gretel, la narrativa deja las migajas para que el espectador las siga en su mente y se adelante a los hechos. Los cuales sorprenden desarrollándose de manera algo diferente a lo esperado. “Conspiración Divina” de Tarik Saleh es una telaraña que captura la curiosidad del espectador rápidamente. No solo eso, sino que juega con las expectativas habilidosamente. Y si bien a priori podría parecer una película sobre la religión islámica y su relación con el poder, se puede extrapolar sin esfuerzo alguno a cualquier religión.
Son muchas las historias que cuentan con varias interpretaciones en el cine. Pero pocas llegan a la cantidad que contabiliza Drácula a lo largo de la historia del séptimo arte. En esta ocasión el foco se corre del conde más famoso del mundo, para plantarse en su ayudante. “Renfield” de Chris McKay, es una comedia que busca innovar en el ya icónico relato de terror, a fin de hacernos reír y repensar la relación amo/ayudante que tienen estos dos seres. El vampiro más famoso de la historia, Drácula, no habría podido llegar tan lejos de no ser por la ayuda de su familiar/ayudante Renfield. A cambio de vida eterna y algunos poderes, el debe conseguirle alimento a su amo. Todo parece muy sencillo, pero recordemos que no existe el Pedidosya de personas para ser comidas. Pero tras décadas de esta relación, el Renfield decide romper con este vínculo tóxico que poseen. ¿Existe una vida sin Drácula?
“Legítima defensa” de Andrea Braga. Crítica. Un thriller pampeano. Pocos géneros polarizan más a la audiencia que el thriller, el público los ama y los consagra como obras maestras o los detesta profundamente. Por lo que requiere una valentía particular, la mera intención de hacer una película de este estilo. Sin embargo Andrea Braga pareciera no atemorizarse ante esta idea y realiza “Legítima Defensa”. Un thriller espeso, cuyo estreno es el próximo jueves 23 de febrero. Si algo sabe muy bien Eduardo, es que la frase “pueblo chico, infierno grandes”, encierra varias verdades. Escapa del lugar donde nació y se crió, para esconderse en el anonimato ofrecido por las grandes urbes. Allí se convertirá en fiscal y tendrá una hija con una pareja de la cual ya no forma parte. Pero como un bumerang, su pasado vuelve a atormentarlo cuando varias mujeres aparecen asesinadas en su pueblo natal. Lo que a priori parecía una película del subgénero “hombre vuelve a su pueblo”, inmediatamente se transforma en una oscura investigación de asesinatos. Tanto los pensamientos como los sentimientos del fiscal protagonista, se encuentran protegidos dentro de él como la caja negra de un avión. Lo cual lo hace poco permeable a la empatía del espectador. Se debe a que no la busca, ni la quiere, quien observa sus acciones está invitado a acompañarlo en la aventura solamente. No le interesa ser juzgado y mucho menos comprendido, sus acciones hablan por él. Una cámara curiosa, de movimientos precisos capta todo lo que sucede. Atenta a todos los detalles, una cámara casi fincheriana. En una trama que se anima a tratar la problemática de los agroquímicos y su contaminación. Además de varios subtemas que terminan generando un efecto enredadera, donde si bien todo parece en orden, no se termina profundizando mucho en nada. Los pequeños pueblos del interior del país se prestan para mostrar una realidad sórdida y aterradora, y Andrea Braga lo explota a la perfección en “Legítima defensa”. Cocinada a fuego lento, esta experiencia recompensa a quien sabe esperar. Si te gustan los thrillers densos y oscuros, esta película es para vos.
“El método Tangalanga” de Mateo Bendesky. Crítica. ¿Giordano? Agarramela con la mano. Francisco Mendes Moas 6 noviembre, 2022 0 275 Las bromas telefónicas por estos años ya casi se encuentran en extinción. Puede ser consecuencia de la desaparición de los teléfonos fijos o que las nuevas generaciones ni siquiera se llaman entre sí. Una lastima, mejor podrían desaparecer los programas de madrugada donde uno tiene que llamar para adivinar la palabra que se forma en la pantalla. Sin embargo “El método Tangalanga” elige reivindicar, tal vez incluso volver a poner en vidriera al genio cómico Tangalanga. Quien supo hacer reír generaciones con sus llamadas en broma. Mateo Bendesky le dedicó una película, la cual tuvo su estreno durante la 37º edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. Llegando a las salas de todo el país el próximo 19 de enero del 2023, fecha a agendar. En la función se hizo presente gran parte del elenco: Martín Piroyansky, Julieta Zylberberg, Alan Sabbagh y Luis Rubio. Además de parte del equipo técnico como Diego Dubcovsky y Federico Rotstein. Podemos decir que no tenemos ante nosotros una biopic de Tangalanga, en el estricto sentido de la palabra. Pero tal vez si sea una de Jorge Rizzi, un oficinista incapaz de hablar en publico y mucho menos ante el sexo opuesto. Sin embargo, tras pasar por una sesión de hipnosis su personalidad cambia cada vez que escucha un sonido particular. El ruido que hace un teléfono antes de marcar. Y al igual que hace Stanley Ipkiss cuando se pone “La máscara”, Jorge se transforma en el desopilante Tangalanga. Como un buen plato de cocina, esta película mezcla varios sabores a la perfección. Algo de comedia romántica, otro poco de biopic, material de archivo y muchas, muchas llamadas telefónicas. Este último, uno de los elementos menos cinematográficos que existen en la historia. De esta manera consigue resultados que varían entre la risa incómoda, la carcajada estruendosa o el nudo en la garganta previo al lagrimeo.
“Legions” de Fabián Forte. Crítica. Cosa de mandinga. Francisco Mendes Moas 4 noviembre, 2022 0 92 La 37° edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata posee una sección especial para las películas de género nacionales. Uno de sus exponentes, Fabian Forte, se hace presente con su último audiovisual “Legions”. La misma se podrá ver este miércoles 9 a las 23:50 en la sala Aldrey 5, el jueves 20:10 en la sala Aldrey 1 y una última función el viernes 11 a las 23:10 en la sala Aldrey 1. Todas dentro del Shopping Paseo Aldrey. Antaño un poderoso chapman, ahora un recluso de un manicomio, Antonio Poyju deberá encontrar la forma de salvar a su hija. Esta es perseguida desde chica por un poderoso demonio, que buscará hacerle perder la fe en sus raíces. Para hacer esto Antonio deberá buscar la manera de escapar de la institución que lo mantiene apartado del mundo. Cuando el espectador se sienta a ver una película de demonios, es muy probable que estos seres malignos tengan bases en la religión católica. No es su culpa, William Friedkin pareciera haber dejado las bases sobre las cuales construir este subgénero de terror con “El exorcista”. Aunque aquí Forte propone mirar al pasado de estas tierras. Las maneras que tenían los pueblos pre colonizados para entender el mal, pero sobre todo sus formas de repelerlas. La mayoría del audiovisual se transita en una atmósfera opresiva y asfixiante, donde el mal acecha en cada esquina, en cada sombra. Sin embargo, posee grandes momentos de humor. Sobre todo con el equipo que forma Antonio dentro del manicomio. Y ambas emociones conviven a la perfección en una misma película. Una interesante propuesta, que forma parte de una más que prometedora sección dentro del festival, nos trae Fabian Forte. “Legions” abre al espectador un mundo poco explorado al tiempo que con su narrativa, rememora algunas películas del gran Alex de la Iglesia. Calificación.
¿A quien no le paso alguna vez tener un familiar o amigo que sin mala intención nos complica la vida en el momento menos oportuno? Bueno si multiplicamos esto varias veces podríamos acercarnos a lo que sucede en el primer largometraje dirigido por Ismael Zgaib. “Los inoportunos” se presenta como una comedia absurda, con lo más fino del humor cordobés. A partir del día de la fecha, podrá verse en las salas de cine. Jose Maria se encuentra en una etapa de cambios en su vida. Tras la muerte de su padre y la vuelta de su hermano al banco, decide renunciar a su trabajo para buscar algo que realmente lo haga feliz. De lo único que se lamenta, es no poder ver a Laura todos los días. Así que toma el valor y por fin la invita a salir, quedan para esa noche. Mientras se prepara, Jose Maria deberá lidiar con la visita de sus amigos, la mudanza de su ex novia y la mitad de su familia. Todo mientras Laura se encuentra en camino. Lo primero que cautiva al espectador, es la presentación de títulos iniciales. Tan original como bella, presenta los nombres de los participantes de la película escritos en diferentes partes de la oficina del protagonista. Mientras se guarda todo para irse de su trabajo, vamos viendo sobres, carpetas, expedientes, donde figuran los actores y equipo técnico. Si esto funciona con el éxito que lo hace, se debe a la bella dirección de arte involucrada. La cual se mantiene a lo largo del audiovisual. Vestuarios, paleta de colores y escenografía, junto a una puesta de cámara muy prolija hacen que parezca como si Wes Anderson estuviera dirigiendo una sitcom cordobesa. Pero no, fueron Ismael Zgaib y su equipo quienes lo lograron. Seguramente con una ínfima parte del presupuesto de una película del director americano. Hacer pasar un buen momento a los espectadores, no es tarea fácil. Pero Ismael Zgaib, con su ópera prima “Los inoportunos” lo hace parecer así. Absurda y divertida, tatúa una sonrisa en el rostro de quien la mire, mientras cautiva la mirada con su belleza visual. Si no aun no tenes planes para este fin de semana largo, o si lo tenes pero te queres hacer un hueco, acá tenes una salida ideal.
“Juana Banana” de Matías Szulanski. Crítica. ¿Preferís hacer algo que te guste o algo que te de mucha plata? Francisco Mendes Moas Hace 2 semanas 0 143 Dentro de la Competencia Argentina de la 37° edición del Festival Internacional de cine de Mar del Plata, el cineasta Matías Szulanski presenta su nuevo material. “Juana Banana” es su noveno largometraje y realizó su estreno en las salas marplatenses. Un aluvión de miedos e inseguridades al mejor estilo Woody Allen, ideal para aquellos que están por abandonar los veintes. Una joven actriz pasa sus días yendo a castings en los que no queda y escribiendo cuentos que no quiere mostrar. Enérgica, simpática e impredecible, transita las calles de Villa Crespo buscando aquel rumbo en la vida. Ese que todos parecieran saber caminar menos ella. Sin pausa pero constante, pasa de una actividad a otra. Comer, leer, vivir, todo lo hace con gran voracidad. Una película catártica, donde todo se desprende de la protagonista, interpretada por Julieta Raponi. Sus actuaciones, diálogos y sobre todo su risa, le dan entidad a aquellos temores que desprende el guión. Discusiones banales como queres saber quien es el mejor Beatle o si un libro es ficción o no, rememoran a la famosa trilogía de Richard Linklater. Aunque faltaria agregarle el ritmo de las películas de Woody Allen y la estética mumblecore. Todas estas comparaciones pueden usarse para ilustrar a “Juana Banana”, pero ninguna de ellas la define. Matías Szulanski se las arregla como una bartender de alta coctelería, para mezclar todo esto y hacer algo propio. Tal vez sea ese agregado porteño o la actuación de los padres del director. O capaz la simpleza con la que logra marinar todas estas cosas para hacer una película tan divertida como profunda. Calificación.
Hay algo en las películas sobre profesores y alumnos en donde todos podemos identificarnos, algunos más otros menos. Quizá se deba por esa experiencia compartida de pasar por un aula, esperar con ansias el timbre y saber que al otro día el mismo grupo de gente va estar esperando. O tal vez sea ese componente alquimico que desprende la enseñanza, la cual siempre logra captar la atención de quien lo vivencia. La nueva película de Diego Lerman, forma parte de este reducido grupo de producciones. Tras su premiere en el Festival de San Sebastián de este año, “El suplente”, protagonizada por Juan Minujín, desembarca este jueves 13 de octubre en las salas de cine. Intentando demostrar que el cambio de lo macro, se encuentra en lo micro. Como reza el eslogan: “Nadie se salva solo”. Por más invulnerable que alguien se sienta, siempre va a necesitar una mano amiga. Lucio es un académico del mundo de las letras, a quien nada lo motiva. A pedido de su padre, accede a tomar unas horas en una secundaria del conurbano. El nuevo profesor se verá obligado a buscar la manera de tender un puente entre su mundo y el de los adolescentes. Al mismo tiempo que intenta ayudarlos con sus problemas, sobre todo a Dylan su alumno favorito. A quien lo persigue una banda del barrio por tratar de vender drogas en el colegio. Lo que comienza como un drama de colegio, de a tramos se desvía para tocar las orillas de thriller. Sin perder nunca el eje de lo que quiere contar, ni caer en lugares comunes. Al tiempo que presenta algunos encuadres tan atrapantes como arriesgados, que cautivan al ojo. Y por si esto no fuera poco, Alfredo Castro se calza el traje de “buen tipo” que tan bien le queda, brindando una interpretación impresionante. Solo eclipsado por el gran viaje transformador que realiza el personaje del suplente, al que le pone el cuerpo Juan Minujín. Con grandes pasajes de buen cine, “El suplente” de Diego Lerman se presenta como uno de los grandes estrenos de este año. Una historia redonda, a la que se le suman grandes interpretaciones y un espléndido apartado técnico. Tan capaz de emocionar, como de dejarte al borde del asiento.
Tras varios años de muchos escándalos personales que salen constantemente a la luz, el director David O. Russell estrena su última película. Este jueves 6 de octubre, “Ámsterdam” llega a muchas de las salas del país. Integrada por un elenco de primer nivel compuesto por: Christian Bale, Margot Robbie, John David Washington, Alessandro Nivola, Anya Taylor-Joy, Chris Rock, Mike Myers, Robert De Niro, Taylor Swift y Rami Malek entre otros. Dos amigos que se conocieron en la primera guerra mundial, uno abogado y el otro doctor, buscarán revelar cómo murió quién era su superior en la guerra. Esto los llevará a una intrincada y secreta trama en donde se cruzaran con una enfermera que supo ser amiga de uno y amante del otro. Todo durante los días previos a que se desate la segunda guerra mundial. Una vez más O. Russell, mezcla hechos reales con ficción. Generando un primer acto dinámico y atrapante. Marcado por su estilo de diálogos veloces y montaje hiperactivo. Pero apenas la trama se complejiza y entra en el terreno de la investigación, todo se estanca y se vuelve innecesariamente rebuscado. Pierde toda esa fuerza de la primera parte y se empantana entre relaciones políticas y búsqueda de respuestas al misterio. Cabe destacar que la recreación histórica que presenta el departamento de arte, es sublime. Amsterdam de posguerra como aquel Estados Unidos de entreguerras se sienten auténticos. Todo acompañado por los bellos vestuarios, peinados y maquillajes de aquella época. Por otra parte, es interesante como el personaje interpretado por Christian Bale se convierte en “The Dude” escrito por los hermanos Cohen de “The Big Lebowski”. Se pasa todo el tercer acto drogado hasta las cejas y la trama le pasa por encima de manera más que divertida. Tenemos aquí un producto que se queda a mitad de camino, no es lo suficientemente hiperbólica como para ser una comedia, ni lo suficientemente afilada para ser una sátira contundente. David O. Russell se encuentra en una etapa complicada de su carrera, aun contando con el apoyo de muchos grandes de la industria, como lo demuestra “Amsterdam”. La película se encuentra a varios años luz de lo que supieron ser sus grandes hits.