Una Comedia más sobre…
Daniel Cohen presenta su tercera película titulada “El Chef”, en la cual Jean Reno interpreta a Alexandre Vauclair, un chef parisino reconocido que tiene su propio restaurante y un programa de televisión semanal que realiza por las calles de la capital francesa. Pese a esta enorme ventaja profesional, como todo muta y la cocina no es la excepción, la “gastronomía molecular” parece ser indispensable hoy en día a la hora de prosperar en el mercado y Alexandre es muy tradicionalista para adaptarse a estos cambios. Al mismo tiempo, el personaje está atravesando una crisis creativa y perderá calificación por parte de los críticos, por lo que necesita urgentemente a alguien que lo ayude a reinventarse y adaptarse al mundo gastronómico de hoy en día.
Acá es donde aparece Jacky Bonnot, interpretado por el actor Michael Youn, que es un cocinero autodidacta con dotes y un sobrenatural sentido del gusto que no cuenta con el espacio para demostrar todo su talento. Un día Jacky conoce casualmente a Alexandre Vauclair, a quien admira y de quién aprendió gran parte de su saber, y se unen para llevar cada uno adelante sus objetivos.
La misma Receta
Al parecer, durante el último decenio para la industria es ley que si una película transcurre dentro de la Galia no existe otro actor más que Jean Reno. Asimismo si la película es sobre el mundo gastronómico no existe otra ciudad en el mundo que Paris. Es que de esto se trata “El Chef”, un rompecabezas de clichés y estereotipos de comedias que completan los 85 minutos que dura la película, yendo desde la clásica “pareja-despareja” hasta disfraces ridículos, pasando por todas las herramientas dignas de una comedia de Suar en Prime-Time.
El único punto a favor es la actuación de Jean Reno que demostró hace rato ser un gran actor y tampoco quiero desmerecer a Michael Youn que lo sabe acompañar más que bien. Además, en un momento aparece el genio de Santiago Segura que se roba un par de sonrisas, pero es una participación muy escueta.
Conclusión
“El Chef” de Daniel Cohen es una película que no te va a sacar ni una sonrisa pero puede hacerse llevadera ya que utiliza recursos conocidos por todos generando así que se pasen rápido los ochenta y cinco minutos. Aunque las actuaciones son más que aceptables, sinceramente no creo que merezca la pena gastar dinero en ir al cine a ver esta comedia tan vacía habiendo tantas buenas películas en cartel.