Basada en la novela de David Heggers, la historia se centra en la joven Mae Holland (Emma Watson), quien conseguirá el empleo de su vida sumándose a una prestigiosa empresa de Internet muy a lo Google conocida como EL CÍRCULO. En este trabajo de ensueño, la protagonista comenzará a trepar velozmente al punto de volverse íntima aprendiz de los cabecillas del lugar, interpretados por Patton Oswalt y Tom Hanks, y hasta darse cuenta de que la compañía busca someter al mundo con un excesivo aunque innovador método de vigilancia extremo.
A todos nos gusta fantasear con que nos tienen vigilados todo el tiempo y que vivimos con las cámaras frontales de nuestros celulares prendidas mientras un obeso en algún sitio recóndito del planeta nos espía con el fin de “prevenir catástrofes”. ¿Son ciertas estás ideas paranoicas que nos gusta dibujar en nuestras mentes? Bueno, es probable… y sin lugar a dudas, la película logra plasmar la idea de una forma interesante y entretenida.
El director James Ponsoldt se encarga de este film que me recordó por qué era tan fan de Tom Hanks hace años, pues el actor ya se encontraba en una fase de su carrera que me estaba agotando bastante. Su personaje es el mejor elemento de la historia, ya que interpreta al típico CEO contemporáneo que mete una excesiva buena onda a sus empleados; una especie de Steve Jobs. El personaje de Oswalt es como el cerebro corporativo detrás del proyecto; no se sabe mucho de él y tampoco nos importa, un detalle desperdiciado si tenemos en cuenta que pudo ser una entidad enigmática. Y dejé para el final mi opinión con respecto a Emma Watson, porque simplemente no la tolero. Entiendo que me voy a ganar el odio de muchos, pero créanme no aguanto sus expresiones ni su calidad actoral, por lo que su personaje se vio atrapado en una intérprete que no logró conmoverme en lo más mínimo. Y esto me dolió horrores, porque su personaje es INCREÍBLE, con giros manejados con una naturalidad impresionante por los guionistas.
En términos visuales la película es muy buena. La forma en que nos presentan esta empresa que adapta de una forma sutilmente satírica lo que es Google está perfecta con sus grandes campos y su basto catálogo de actividades para sus afortunados empleados inclusive. El director cae en el uso de esta técnica de mostrar en pantalla lo que sucede en los dispositivos electrónicos; detalle muy usado en series como House Of Cards o Sherlock y que hoy en día se convirtió en moda para todo proyecto existente. Pero aquí funciona muy bien, ayudando al desarrollo de una historia que cuenta con uno de los mejores finales que van en el año.
El Círculo (The Circle, 2017) es una película que logra atraparnos, ya que nos muestra, de una forma realista, lo que va a ser el mundo en el transcurso de algunos años. La ciencia ficción deja la fantasía de lado y se destaca mostrando una realidad posible y un mensaje que se limita a decirnos “la tecnología es buena si es usada para el bien“, pudiendo haber caído en un burdo mensaje anti tecnológico al que nos tienen acostumbrados tantos artistas pesimistas del medio. Yo se las recomiendo, vale la pena echarle un vistazo.