En la Islandia rural contemporánea, una niña de 9 años, Sól, es enviada a la casa de campo de unos parientes lejanos para trabajar durante el verano y aprender a madurar. Allí conoce a un joven campesino, Jón, que le llama la atención desde el principio. En la casa también está la hija de los agricultores, Ásta, que también tiene los ojos puestos en él. A partir de allí, Sól se verá enredada en una historia que apenas puede comprender.