Temible policial negro con Statham
De Jason Statham se esperan películas de acción al estilo de sus compañeros de «Los indestructibles». Pero, en realidad, se trata de un actor que puede protagonizar películas con mayores matices, ya sea comedias negras de Guy Ritchie o un temible policial negro ultraviolento como esta «Safe», que en sus mejores momentos recuerda la sensación de que todo podía pasar que provocaban los films chinos de John Woo.
Aquí hay una nena china secuestrada por las tríadas debido a su capacidad prodigiosa para recordar y analizar cifras, lo que la convierte en una computadora humana infalible y también sin disco rígido a ser analizado por la ley o las bandas rivales. Justamente es la mafia rusa la que empieza a querer tener la información que sólo posee la nena, y mientras rusos, chinos y policías corruptos se pelean entre sí. la chica escapa y es econtrada por un ex policía ahora convertido en una especie de linyera humillado por todo el mundo.
La trama está bien construida para que estas dos almas torturadas se encuentren y armen una formidable alianza, y a partir de ahí, una furibunda e interminable catarata de secuencias violentas que tienen la particularidad de transcurrir en lugares llenos de transeúntes inocentes (este toque también recuerda las viejas películas policiales de Hong Kong, de las que por lo visto el director es realmente fanático). Hay tiroteos en hoteles, restaurantes rusos y casinos chinos, cada uno más intenso e impresionante que el anterior, y también hay una buena dosis de humor muchas veces aplicado por la pequeña Catherine Chan, cuyo personaje tiene más sensatez que todos los personajes adultos.
La fotografía y todos los rubros técnicos son de primer nivel, y el reparto recupera a dos excelentes actores olvidados, Chris Sarandon y el alguna vez Robocop, Robert John Burke.