La crisis energética de la Argentina alcanzó uno de sus picos más importantes en el verano de 2013/14, con cortes de luz en gran parte de Capital Federal y Gran Buenos Aires durante días en los que el calor no daba tregua. Las jóvenes realizadoras Regina Braunstein y Agustina González Bonorino tomaron esa circunstancia como disparador para El corte, que luego de ser presentada como tesis de grado en la carrera de Diseño de Imagen y Sonido ahora se estrena comercialmente en el cine Gaumont.
La acción se sitúa en la zona de Quilmes, en medio del caos desatado por la falta de agua y el desabastecimiento de los comercios. En ese contexto de desamparo y ausencia estatal se desarrollan tres historias que irán acercándose a un punto común a medida que avance el metraje.
Habrá un joven que vuelve a la casa de su infancia y encuentra una realidad ajena y desconocida, ilustrada en una madre al borde del colapso emocional; un chico que observa cómo su padre se convierte en un hombre paranoico y violento; y dos hermanos que luchan por sobrevivir en medio de una economía decreciente.
Deudoras del cine de John Carpenter, Braunstein y González Bonorino muestran el progresivo desgajamiento de ese orden mediante una amenaza -invisible pero concreta- que se ciñe sobre ese grupo protagónico (Paloma Contreras, Nicolás Mateo y Mateo Silos, Nicolás Goldschmidt, Roxana Berco y Aldo Onofri). A todos ellos se observa sin juzgar. El resultado es un efectivo thriller de tintes sociales en el que incomodidad y la sensación de estallido inminente están a la orden del día.