Así en la vida como en el cine
"Estoy viviendo en un género que no me pertenece" asegura el crítico de cine Víctor Téllez (Rafael Spregelburd) cuando su vida da un giro impensado y no puede afrontar que lo que le ocurre es real, sorprendiendo también a su entorno.
Sarcástico y cínico, Téllez trabaja como crítico desde hace más de veinte años y percibe el mundo como si él mismo fuera una cámara de cine en esta bienvenida película del director Hernán Guerschuny que apuesta a la comedia romántica desde otra óptica.
Luego de ser abandonado por su esposa, Tellez encuentra a Sofía (Dolores Fonzi) y su punto de vista comienza a ser otro. De este modo, se verá impulsado a visitar nuevos ámbitos (el teatro under) y a una convivencia que lo sacará de su eje. Toda su concepción sobre el cine y las historias que se de desarrollan en la pantalla grande serán reformuladas y bajadas a una realidad diferente. Ahí es cuando la película se vuelve más divertida, ya que el protagonista se debate entre las críticas benevolentes que hace a películas mediocres, soporta la burla de sus colegas y compañeros en la mesa del café y hasta es capaz de llorar desconsoladamente en una función privada para la prensa.
El crítico acierta en la creación de los climas y resulta funcional la "voz en francés" que lo atormenta a lo largo de la trama. El director del film, también periodista, conoce muy bien los entretelones del mundo periodístico y los retrata en lugares reconocibles para los integrantes del medio, sin dejar afuera a un público que festejará los gags de esta historia que se mueve entre la cámara lenta y los clichés de un romance que comienza. El juego del "cine dentro del cine" está nuevamente en marcha.