Luego de su debut como realizador en 2017 con «Los Globos», Mariano González vuelve a la pantalla grande para contarnos la historia de Luisa, quien durante su trabajo como niñera, y frente a la visita de su novio Miguel, se distrae y el pequeño Felipe termina internado. Es así como veremos las consecuencias por las que tendrá que atravesar la protagonista.
“El cuidado de los otros” es una película que se sostiene sobre todo por la actuación de Sofía Gala Castiglione como la protagonista, quien a causa de esta pequeña distracción su mundo comenzará a derrumbarse, como también su estabilidad emocional. Las consecuencias materiales no pasan a ser más que la pérdida del trabajo, pero en el ámbito sentimental se despertarán en ella muchas sensaciones debido a este vínculo que se rompe entre ella y el niño: culpa, impotencia, desesperación, preocupación, empatía, ambigüedad de querer ayudar a su novio pero a la vez reconocer que estuvo en falta e incluso una obsesión con esa familia que ahora la rechaza. La actriz logra transmitir esta transformación a través de sus gestos y actitudes: dice más con una mirada que con las palabras, ya que tampoco nos encontramos con una gran presencia de diálogos. Si bien está bien acompañada por el resto del elenco, es ella quien se luce y se pone la película al hombro.
En cuanto a los aspectos técnicos nos encontramos con una sobria puesta en escena, donde se destaca el clima tenso que se genera alrededor de la situación y de los personajes; no sabemos qué puede pasar. Sin embargo, y a pesar de que la película dura 72 minutos, por momentos se siente algo extensa y repetitiva hasta su final que concluye de una forma abrupta y nos deja con ganas de saber más sobre el momento que está ocurriendo.
Es interesante también cómo el director no le da todos los recursos servidos al espectador, sino que este tendrá que sacar sus propias conclusiones sobre lo sucedido y terminar de atar los cabos sueltos de las diversas situaciones, apelando a su imaginación y haciéndolo partícipe de la historia.
En síntesis, “El cuidado de los otros” es un film correcto que se sostiene gracias a la actuación de Sofía Gala Castiglione y de la composición de su personaje, como además del clima tenso que se genera, a pesar de sentirse un poco extenso y reiterativo.