El Demonio Quiere a tu Hijo: Pánico embarazador.
Se estrena una tradicional película de terror, con un bebe, una entidad desconocida que atormenta a la protagonista y jump scares, entreverados por un drama intenso e interesante.
En un año con grandes estrenos en el género del terror/suspenso como Hereditary o A Quiet Place, ahora llega el turno de El Demonio Quiere a Tu Hijo (Still/Born), una película sin mucha originalidad al igual que el nombre doblado al castellano que le otorgaron, pero tiene sus puntos fuertes.
El título, “El Demonio Quiere a tu Hijo” desgraciadamente nos obliga a tener un solo punto de vista del film, descartando gran parte de la trama que nos presenta el guion. Que empezamos con un parto de gemelos que sale mal. Deducimos que uno de los bebés muere debido a que una de las cunas está vacía. A la par concemos a la protagonista, Mary, que tiene visiones relacionados a sus hijos, el fallecido y el que está vivo, que teme perder.
Vive ella con su pareja, Jack, el clásico y flamante hombre de empresa que debe trabajar mucho y casi nunca está en casa. Por lo tanto Mary sola, lidia con una creciente neurosis, siendo diagnosticada con depresión postparto y con el temor de perder a su hijo en manos de un ente demoníaco. Esto nos deja a nosotros, el espectador, con la duda de saber si es real o no lo que sucede en pantalla, o sí solo es una invención de la protagonista.
¿Será un demonio que amenaza a la madre con llevarse a su hijo, o serán sus conflictos internos lo que atormentan a Mary? Pero esto no se sostiene durante toda la película y mucho menos con este título. Brandon Christensen es el nombre del director y guionista (Junto a Colin Minihan como co-guionista) que presenta, esta película en cuestión, como su debut en largometraje, ya que ha realizado varios cortos y una miniserie en su carrera.
Al no arriesgarse mucho, el director termina saliendo satisfactoriamente de este film de terror que tiene momentos de susto importantes, ayudados por una aceptable edición y una muy buena banda de sonido, con efectos que generan jump scares dignos de estimular músculos de tu cuerpo que no pretendías mover. Como también una buena actuación de la protagonista Christie Burke (Black Fly) que sostiene la película con su rostro bastante expresivo, mostrándonos un personaje frágil con pequeños momentos determinantes.
Existen varios huecos en la narración, como por ejemplo la falta de justificación en porque los personajes no le cuentan al otro lo que les pasa o ven, sirviendo como una vaga excusa para que los sucesos que se manifiesten luego.
El conflicto amoroso entre la pareja protagónica parece que precede al tiempo que nosotros apreciamos, pero no nos dan ni una pista sobre eso. De pronto no se cuentan las cosas, no confían entre ellos, entregándonos una protagonista que pareciera no saber de qué trabaja su pareja. El cual debe irse de viaje por su ocupación. Así se presentan lagunas tanto en la construcción de los personajes como en el guion.
Aunque por instantes recuerde a películas como Actividad Paranormal, Poltergeist e Insidious, el verdadero punto fuerte es ver como el miedo de perder a su hijo se vuelve aterrador tanto para la protagonista como para nosotros.
A pesar de que existan escenas innecesarias que aparentan que el film fue alargado para que llega a la casi 1 hora y media de duración, El Demonio Quiere A Tu Hijo entretiene y cumple con creces lo poco que nos ofrece desde el principio. Solo un film de terror pequeño, común y corriente, que juega con nuestra percepción de lo que sucede hasta el hartazgo, y que resulta agradable en el tiempo que transcurre, si dejamos pasar algunas circunstancias mencionadas anteriormente.