Llega a la pantalla grande este nuevo film de Carlos Sorin (“La Ventana” (2009), “El camino de San Diego” (2006), “El perro” (2004), “Historias mínimas” (2002), entre otras), con dos grandes protagonistas: Luis Luque y Beatriz Spelzini, quien hace muy poco se convirtió en la primera actriz argentina en obtener uno de los galardones más codiciados que otorga la Academia de Cine Alemana por su trabajo en el filme “El día que no nací”, ópera prima del realizador alemán Florian Cossen, que aborda la historia de una mujer que fue apropiada ilegalmente durante su niñez en la última dictadura militar en Argentina.
La trama comienza en verano de 2009, cuando Beatriz (Spelzini) va a buscar a su marido, Luis (Luque), a un neuropsiquiátrico, después de que este sufrió un brote psicótico y cuando regresan a su hogar, luego de ocho meses de ausencia, Donatello, el gato de la casa lo ataca y luego escapa.
A partir de ese suceso Beatriz no puede dejar de estar alerta, aunque llevan 25 años juntos, tienen dos hijos ya casados Verónica (María Abadi) y Martin, ahora nada es como antes, su esposa siente temor por la situación psíquica de su esposo, calculemos que estuvo un largo tiempo sola y tuvo que adaptarse, ahora es otra la situación y está llena de inquietudes, pero poco a poco el clima se irá enrareciendo, el gato es una de las claves, pero no aparece, las noches se convierten en un infierno, surgen todos los fantasmas y extraños sucesos comenzarán a ocurrir.
La narración nunca pierde el ritmo y se va a desarrollar por otro carril cuando Luis propone unas vacaciones en Paraty (Brasil), a partir de esto piensan que el viaje les puede brindar cierto equilibrio a sus vidas.
El guión de esta película tiene mucho suspenso, tensión, muchos toques de Alfred Hitchcock,
está llena de escenas muy logradas, hay un poco de humor negro; el encierro, donde se desarrolla es en la casa y el auto, en pocos espacios, pocas paredes, habitaciones, puertas, con ventanas y ventanales, es constante la sensación de angustia y temor, el espectador está pendiente de cada momentos y también tiene la sensación de claustrofobia, cada personaje está bien construido tanto los principales como los secundarios, tiene buena fotografía, música y abundan las sorpresas.