Transformistas nómadas
Sensible documental de observación sobre una compañía de transformistas que lleva cinco décadas recorriendo Chile.
Desde hace casi cinco décadas, el Circo Show Timoteo recorre Chile con un espectáculo osado para la época en que arrancó y para los tiempos -Pinochet incluido- que le tocaron vivir. Porque en este circo no actúan animales, trapecistas ni payasos, sino transformistas. La periodista y documentalista Lorena Giachino siguió las andanzas de estos artistas nómadas en un momento crucial: la enfermedad de su creador, dueño y director, René “Timoteo” Valdés.
Es un documental de observación: la cámara registra, sin interactuar con los protagonistas, la vida cotidiana de la compañía tanto arriba como abajo del escenario. Los problemas a los que se enfrenta, desde la convocatoria de los cada vez más escasos espectadores hasta la instalación de la carpa en cada lugar al que llega. Y, sobre todo, las dudas sobre el futuro y la continuidad: el cigarrillo provocó daños irreparables en los pulmones de Valdés, que ya anda cerca de los 70 y piensa, con tristeza, en el retiro.
Como bien dice el título, este es un circo pobre: da frío de sólo ver los modestos trailers donde viven los artistas. El imponente paisaje de la cordillera nevada, la camaradería reinante y la posibilidad de vivir del transformismo son el contrapeso de la melancolía que, como en todo circo, sobrevuela el ambiente. Los sketches -rudimentarios, chabacanos- acentúan la simpatía y la compasión que despiertan estos hombres disfrazados de mujer.
Giachino logra transmitirnos todas esas sensaciones. Y nos despierta la curiosidad sobre los orígenes de esta compañía, cómo enfrentó a una sociedad tan conservadora como la chilena, cómo superó los años de dictadura, cuáles son las historias detrás de estos señores. Esto es, a la vez, un mérito y un defecto: quizás algunas entrevistas habrían servido para adentrarnos más en el mundo de Timoteo y su estoica troupe.