Un policial que se toma muy en serio
"El gran golpe" empieza con un impresionante robo a un banco por una banda de sofisticados asaltantes enmascarados y armados hasta los dientes. La película tiene fuertes escenas de acción, pero en la medida que luego describe más asaltos a distintas sucursales del mismo banco, presidido por un oscuro magnate encarnado por Bruce Willis, va quedando claro que el guión tiene pretensiones de algo más que un policial.
Y aquí esta el problema: la película quiere ser más de lo razonable, y va del film negro al de acción, al melodrama y el thriller conspirativo, para colmo mezclando demasiados personajes, casi todos policías o agentes del FBI o exmilitares, todos con pasados trágicos y motivaciones revanchistas con la idea de confundir al espectador acerca de la identidad del jefe de la banda. Por momentos hay una mezcla de géneros un poco híbrida, pero la película no deja de tener sus partes buenas, sobre todo en la primera mitad, llena de acción y suspenso, que luego repunta hacia el final. Hay que aclarar que no es la típica película con Bruce Willis, que actúa poco, y que en realidad el verdadero protagonista, como el agente del FBI a cargo de la investigación, es el eficaz Christopher Meloni.