"En un agujero en el suelo, vivía un hobbit. No un agujero húmedo, sucio, repugnante, con restos de
gusanos y olor a fango, ni tampoco un agujero seco, desnudo y arenoso, sin nada en que sentarse o que
comer: era un agujero-hobbit, y eso significa comodidad."
Así empezaba El Hobbit, libro en el que se basa la trilogía que va a realizar Peter Jackson cuya primera parte, The Hobbit: An Unexpected Journey, fue estrenada ayer por estos lados. La frase de arriba fue lo primero que J.R.R. Tolkien escribió del libro, él se encontraba corrigiendo exámenes, allá por 1929, cuando encontró una hoja en blanco de exámen. Esto le vino al pelo para tomarse un recreo y de la nada escribir esa primera mítica frase. Seis años le llevó terminar el libro, años que usó para documentarse de folklore anglosajón, bibliografías y magia creativa.
Casi cien años después, tenemos una película que adapta el primer tercio del libro, Peter Jackson se encargó de dirigirla como hizo con la trilogía de El Señor de los Anillos, la obra posterior al Hobbit y más famosa de Tolkien.
No soy de leer libros, directamente... no leo libros, si, sí, ya sé, no hace falta que comenten al respecto, ya me he fumado comentarios de amigos (y me sigo fumando) al respecto. Debo haber leído tres libros en mi vida por decisión propia, uno de ellos es El Hobbit. Fuí al cine con pocas expectativas por varios factores, los principales serían dos. 1- Me aburren un poco las películas (juegos, comics, cartas, rol, etc) de fantasía heroica / medievales / épicas, en general. Siempre sentí que repiten una formula de modo cansador y encima le suman política ("blablabla!" mucho bla!) de reinos, idas y venidas. Mes es agotador. 2-Usualmente, para películas tan esperadas, pochocleras y demás, al menos por acá cerca, suelen estrenarlas subtituladas sólo en 3D, por lo que si querés verla en 2D (normal) la tenés que ver doblada, y las pelis me gusta verlas en su idioma original.
Fuí al cine porque el libro me había gustado mucho, cuando lo leí hace años, y porque hacía tiempo que no escribía una crítica de estreno pochoclero para Tierra Freak. Me lo debía.
Mientras estaba en el cine, anoche en el estreno, pensaba "mierda, estoy tan contento que no voy a poder escribir nada malo de esta peli". Terminó la película y estaba aún más contento por el resultado final. Llegué a casa y pensé "si escribo ahora mismo sobre ella, serán puras flores, mejor escribo mañana, más frío y tranquilo". Hoy es ese mañana, estoy más frío y tranquilo, pero sigo con una sonrisa de oreja a oreja sin poder encontrarle algo realmente malo a éste film.
Tuve la suerte de poder verla sin un 3D innecesario, en su audio original con subtitulos y valió la pena.
Esta primera parte bordea la majestuosidad durante las casi tres horas que dura la película. Parece totalmente al vicio entrar en detalles sobre el deleite visual de efectos especiales, pero no lo es. Es un despliegue infinito de cgi que no contrasta, ni sobresale chocantemente como en otras pelis, vuelve todo real, creíble, natural y fantástico. Es como si pudiesen hacer real, PALPABLE y creíble cualquier criatura imaginaria soñada, eso le suma muchísimo a la obra. Cada elemento vivo fantástico tiene vida propia, con soltura, dinamismo y eso le da un naturalismo que te deja más que satisfecho como espectador.
Dejando de lado lo visual, que por si no quedó claro: es impecable, actoralmente se destacan los actores principales: Martin Freeman, quien encarna al hobbit Bilbo con sinfín de expresiones casuales y ajustadas; y Ian McKellen en el papel de Gandalf, que lo tiene aceitadisimo por haberlo interpretado en la trilogía de The Lord of The Rings, claro. Gran mención especial para Andy Serkis descosiéndola prestando su voz para Gollum. El resto de los roles no están mal, pero no se destacan, simplemente porque los personajes no lo hacen en este film, por ahí se asoma un poco Thorin, el personaje de Richard Armitage, pero es más bien (al menos en esta parte) un simple elemento potenciador para la evolución personal del protagonista.
La peli tiene un excelente ritmo aclimatada por una música solemne bien certera. Es un subi-baja entre comedia y acción, pero englobado en una gran aventura. ESO es el punto fuerte del film, Jackson logró que tengamos una de esas pelis de aventuras inolvidables, cargadas de escenas de acción tremendas y chistes repentinos muy graciosos.
La historia? Un "simple" viaje largo con un trasfondo interesante, cargado de peligro y aventura.
Si te pareció algo tediosa la trilogía de El Señor de los Anillos, hay altas chances de que éste comienzo de trilogía te encante.