En el año del 75° aniversario del personaje que dio inicio a los superhéroes en los comics, Superman, conocido también como el "Hombre de Acero", regresa a la gran pantalla y lo hace con estándares muy altos.
No sólo porque están involucrados en el proyecto Christopher Nolan y David S. Goyer (dupla que que hizo de la trilogía de "Batman, El Caballero de la Noche" un éxito de taquilla a nivel mundial por su tono adulto y oscuro) sino porque además un maestro en secuencias de acción como lo es Zack Snyder ("300", "Watchmen") se pone al frente de esta superproducción que narra su origen con una visión muy personal al respecto, basándose en la mitología creada por Jerry Siegel y Joe Shuster allá por 1938 y sumando muchos elementos que se fueron desarrollando a lo largo de su rica historia.
El film comienza en Krypton, un planeta lejano, moribundo y al borde de la destrucción, durante un alzamiento militar liderado por el General Zod (Michael Shannon) y en el que un científico, Jor-El (Russel Crowe) junto su esposa Lara (Ayelet Zurer), tratan de salvar a su único hijo recién nacido de una muerte segura enviándolo a la Tierra en una pequeña nave, al mismo tiempo que Zod, derrotado, es enviado a la conocidísima "Zona Fantasma" en la que pasará una eternidad en animación suspendida junto a un reducido número de sus más fieles seguidores.
Años más tarde la historia continúa en nuestro planeta, con un Clark Kent (Henry Cavill) adulto, desalineado e introspectivo que pasa sus días viajando, tratando de pasar lo más desapercibido posible, oculto pero a la vista de todos con el propósito de averiguar de dónde viene y de saber cuál es su rol en este mundo. Mientras tanto vemos -a través de flashbacks- algunos pasajes de su infancia y de cómo fue criado en la granja de Jonathan (Kevin Costner) y Martha (Diane Lane), sus padres adoptivos; y además cómo fue descubriendo sus increíbles habilidades. Gracias a esa búsqueda por conocer sus orígenes es que conoce a Lois Lane (Amy Adams), una joven e intrépida reportera del Diario "El Planeta".
Pero todo comienza a complicarse cuando Zod y sus guerreros logran escapar de su cautiverio y se dirigen hacia la Tierra en busca del último hijo de Krypton, amenazando a la humanidad y poniendo en peligro al mundo entero. Nacido como kryptoniano y criado como humando Kal-El/Clark Kent es obligado a presionar sus propios límites y proteger a su planeta adoptivo.
Esta película, que ya tiene confirmada una secuela que será dirigida nuevamente por Snyder y escrita por Goyer (es muy posible que sirva de puente para la "Liga de la Justicia") es un muy meritorio reinicio para la franquicia de "El Hombre de Acero" tras el fallido estreno de "Superman Regresa" en 2006.
Desde el punto de vista técnico, cuenta con escenas de acción muy bien logradas. La estética de Krypton y el vestuario no pasan desapercibidos. Es increible como unos pequeños cambios al reconocidídimo traje azul y rojo, lo hacen familiar pero a su vez muy diferente a versiones anteriores. Las actuaciones del elenco son impecables, sobresaliendo Michael Shannon como el villano de turno.
En lo que respecta al británico Henry Cavill, probó ser la elección perfecta para intepretar a éste nuevo Superman más terranal, lleno de dudas y frustraciones. Amy Adams le dio una vuelta de tuerca a lo que signnifica ser Lois Lane dejando de lado el papel de damisela en apuros para pasar a ser un personaje con mayor determinación. Completan el reparto Antje Traue como Faora-Ul, Harry Lennix como el General Swanwick, Richard Schiff como el Dr. Hamilton, Christopher Meloni como el Coronel Hardy y Laurence Fishburne como Perry White.