Tenía tres ideas preconcebidas sobre esta película que después de verla no han cambiado.
1- Las películas de terror con actores de mucho prestigio suelen ser malas y/o aburridas (caso ‘Frankestein’ con Robert DeNiro o ‘Lobo’ con Jack Nicholson que, oh casualidad, también es de hombres lobos) pero no por falta de calidad sino porque suelen elegir directores muy capaces pero ajenos al genero.
2- El hombre lobo que más me impresiono sigue siendo el de ‘Un hombre lobo americano’, el clásico de John Landis de los 80’s.
3- Si segundas partes no suelen ser buenas, peor las remakes.
Sobre el primer punto, acá tenemos un film dirigido por un director medio pelo como es Joe Johnston (‘Jumanji’, ‘Jurassic Park 3’ o dentro de poco ‘The First Avenger: Captain America’) quién llegó al proyecto después que otros nombres mas prestigiosos se bajaron. Podía ser buen reemplazo porque la tiene clara con lo de trabajar con efectos digitales… lastima que la idea era que este film sea filmado a “la antigua”. Ouch.
Sobre el segundo punto, los efectos de maquillaje de este film están a cargo de Rick Baker, un autentico profesional responsable de ‘Hellboy’, por tirar un ejemplo, que ya había trabajado en ‘Un hombre lobo americano’. Excelente elección sin duda, lastima que insistió en homenajear al clásico maquillaje que usó Lon Chaney Jr. en la versión original. Y si bien el resultado final no quedo mal, luce “fuera de época”. Es igual que cuando aparece el robot en la nueva ‘El día que paralizaron la Tierra’; esta muy bien hecho con los efectos CGI pero se parece tanto al original de los 50’s que uno piensa “¡¡Ey, se parece a Bender de Futurama!!” Ouch de nuevo.
Y por ultimo sobre el tercer punto, era bastante lógico que en estos tiempos hicieran una nueva versión de “El hombre lobo”, uno de los grandes clásicos en la década de los cuarenta/cincuenta cuando la Universal era la principal productora de filmes de terror, la mayoría basados en clásicos de la literatura (‘Drácula’, ‘Frankestein’, etc.). ‘El hombre…’ fue una de las grandes creaciones de esa época tanto porque era una historia original como por la impresionante actuación de Lon Chaney Jr.
El problema de la nueva versión es que por un lado busca cierto grado de fidelidad respetando los elementos más importantes de la trama pero por otro lado tratan de modernizarla con traumas psicológicos, memorias reprimidas y una historia semi-policial. Me parecería excelente si estos agregados hubieran sido bien manejados pero “el secreto familiar” se adivina en cinco minutos y la historia romántica entre los personajes de Benicio del Toro y Emily Blunt queda en nada, apenas toma forma.
Para terminar de hundir la historia, el inspector que interpreta Hugo Weaving es Abberline, un legendario agente de Scotland Yard que estuvo a cargo de la investigación de los homicidios cometidos por “Jack El Destripador”. Es un lindo guiño pero solo eso y no aporta nada.
Si a esto agregamos que Johnston intenta crear un exagerado clima gótico en cada escena y que Anthony Hopkins interpreta al padre del protagonista igual que si estuviera haciendo de Van Helsing en el ‘Drácula’ de Coppola (sin duda la mejor excepción al primer punto) la peli se va a pique sin remedio.
Una lastima porque se nota que había ganas y sobre todo mucho talento para realizar algo mejor.