Finalmente llega a las salas esta producción de origen tunecino en la que un hombre, acorralado por la justicia, encuentra la solución, rápida, a sus problemas. Pero cuando se ve envuelto en un siniestro mecanismo de sujeción, oscuro, tremendo, en el que se convierte en una mercancía cultural más, el relato comienza a hablar de los tiempos que corren con audacia y originalidad. Kaouther Ben Hania se inspiró en la obra del belga Wim Delvoye.