Hacía rato que no la pasaba tan bien viendo una película así. Un thriller de acción y contraespionaje.
Con este papel Jackie Chan podría tranquilamente retirarse de las películas de artes marciales (aunque esta no lo sea en ese estricto sentido) y que todo el mundo lo aplauda de pie. Pero ojalá que no lo haga, queremos seguir viéndolo así.
Con sus 63 años nos entrega una de sus mejores actuaciones (sino la mejor) de su carrera no solo por su edad en escenas de pelea, sino por las secuencias dramáticas perfectamente interpretadas.
Por su parte, el director Martin Campbell nos trae su mejor trabajo desde Casino Royale (2006).
Aquí hay una mezcla de atmósferas de la saga Taken junto con Rambo. De esa combinación sale un producto tan sólido que te olvidás de todo en su casi dos horas de duración.
Las secuencias de acción son muy buenas, aunque no son grandilocuentes. Lo cual es bueno, porque el espectáculo recae en otro lado.
Lo único malo que tiene es la línea argumental que tiene que ver con las internas políticas entre Inglaterra e Irlanda. Tiran mucha data y marea.
En cuanto al resto del elenco, solo se puede destacar a Pierce Brosnan, quien hace un gran laburo de antagonista. Cumple con todos los requisitos.
En definitiva, El implacable es entretenimiento asegurado para el que gusta de este tipo de películas y un gran exponente del género que hacía rato que no entregaba un film de calidad.